Varias son las actuaciones pendientes en el pueblo de Palmés. Una es paliar el deterioro de la vía principal, la carretera que parte de Castro de Beiro y finaliza en Trasalba. De titularidad de la Diputación, la obra no tiene fecha de comienzo
El Palmés, equipo de la Segunda Galicia, vuelve a disponer de un terreno de juego en condiciones. De tierra pero en condiciones. Después de muchos años sin mejorarlo, a finales de la semana pasada acabaron las actuaciones. Consistieron en concreto en raspar la hierba mala que crece, acuchillar y echar el sábrego y posteriormente la arena. "Se le daba un repaso todos los años cuando acababa la temporada, eso es todo lo que se hacía. La última vez que lo adecentaron fue hace diez o doce años, ya ha pasado tiempo. Sí, para el comienzo de la liga, el terreno de juego estará decente", detalla Camilo Otero, tesorero de la asociación de vecinos de Palmés. Pero un campo de fútbol también necesita iluminación, no para los partidos, que se juegan con luz natural, sí para los entrenamientos. Por eso, durante estos días se están instalando focos nuevos.
Actuaciones pendientes
Mientras, varias son las actuaciones pendientes en el pueblo de Palmés. Una es paliar el deterioro de la vía principal, la carretera que parte de Castro de Beiro y finaliza en Trasalba. De titularidad de la Diputación, la obra no tiene fecha de comienzo.
Pendiente de licitación está el poco más de un kilómetro que une Pradobó con Pereiro, cuyo titular es el Concello de Ourense. "Era un camino de tierra", puntualiza Camilo Otero, tesorero de la asociación de vecinos de Palmés. "Es preciso ensancharlo porque ahora, si se juntan dos coches, uno no pasa", remarca. Se va a ensanchar el ramal que sale de la carretera principal.
"Esto es el rural, es lo que hay", relata Otero, al que le gustaría que algún día "hubiese una piscina pública en el pueblo. Las hay, pero privadas".
Bolillos e informática
Lo que no son privados son los cursos. Superada la pausa que provoca el verano, en octubre volverán dos, los de bolillos para mujeres y el de informática, 14 son los vecinos que lo están siguiendo.
Y el alcantarillado, parte más bien, para un pueblo de poco más de dos centenares de habitantes que en invierno se queda en menos. La obra en una parte de la entrada del pueblo se acometió, falta la otra en la calle principal, la que lleva hasta Trasalba.
