El CHUO impulsa una unidad para rehabilitación cardíaca en Ourense

El Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) pondrá en marcha este mes la unidad de rehabilitación cardíaca, un servicio que permitirá mejorar la calidad de vida de los pacientes con patologías de corazón. “Llevaremos a cabo programas personalizados que incluyen ejercicio físico, educación de hábitos de vida y prevención, y apoyo emocional”, detalla Miguel Pérez de Juan, jefe del servicio de Cardiología del hospital. El abordaje de la enfermedad será multidisciplinar: los cardiólogos trabajarán con psicólogos, nutricionistas, enfermeros especializados y fisioterapeutas. La unidad se ubicará en la tercera planta, al lado de hospitalización, de las consultas de Cardiología y del servicio de Medicina Intensiva, por ser un espacio cardioprotegido. “Necesitamos estar en esa zona, por si surgiese cualquier complicación”, apunta Pérez de Juan. El aparataje ya está comprado, por lo que es cuestión de semanas que la unidad entre en funcionamiento. 30 pacientes al día Los profesionales prevén atender a 30 ourensanos cada semana, repartidos en tres días. “Todos los pacientes que sean dados de alta en el servicio de Cardiología irán a una consulta específica en la que seleccionaremos a los que puedan verse beneficiados de la unidad de rehabilitación”, explica Pérez de Juan. Las personas con insuficiencia cardíaca, con patología valvular y aquellas que hayan sufrido un infarto son las principales destinatarias del programa, pero no hay un perfil único. “Todos los cardiópatas se pueden beneficiar de esta unidad, a medida que unos terminen la rehabilitación, se incorporarán nuevos. Al atender a 30 a la semana, llegaremos a una importante cantidad de pacientes”, asegura. El programa se divide en tres fases, personalizadas según la evolución y el estado de cada persona. “La primera se extiende durante el ingreso tras el evento cardíaco, como por ejemplo, un infarto”, detalla Pérez de Juan. La segunda arranca tras el alta hospitalaria, e incluye visitas semanales a la unidad durante un plazo aproximado de dos meses. “Se les hará una prueba de esfuerzo, y según eso se adecuarán las sesiones”, explica. Y la tercera se inicia al finalizar las visitas: “Esta ya es en el domicilio, y dura toda la vida, porque la persona aprenderá a llevar su día a día, a cuidarse, hacer ejercicio físico, dejar de fumar…”. El jefe de Cardiología asegura que el principal objetivo es mejorar la calidad de vida de los pacientes, así como aumentar su esperanza de vida. “Cuando estudié me enseñaron que las personas con insuficiencia cardíaca debían guardar reposo, pero ahora sabemos que son los más beneficiados del ejercicio físico”, apunta.n