Los fieles ourensanos siempre han sentido una veneración especial por la Virgen de los Remedios y, como cada 8 de septiembre, celebraron ayer la romería que culmina nueve días de oficios religiosos en la capilla del siglo XVI emplazada al lado del Puente Romano. Cientos de devotos volvieron a congregarse a lo largo día para seguir la tradición, encendiendo velas en busca de consuelo y apoyo; disfrutar de los oficios religioso o simplemente, comprando unas rosquillas. Los fieles mostraron devoción durante la semana y tres días que dura la celebración religiosa.
El jueves, el obispo Leonardo Lemos Montanet, presidió la celebración eucarística que cerró la novena.
