El gobierno local ha impulsado unos 50, entre los que destacan bajada del IBI, plan estratégico del AVE o lucha contra el radón
El pleno, máximo órgano de representación política en el Concello de Ourense, supone también una carga de deberes para los respectivos gobiernos que se ponen al frente de la ciudad, más si cabe con la situación de los últimos años, en los que la falta de mayorías absolutas otorga fuerza a la oposición para sacar adelante sus mociones, que pese a no ser vinculantes, sí merecen una especial toma de consideración.
En el presente mandato, tras dos años y medio, se han adoptado alrededor de 150 acuerdos plenarios que recogen compromisos con alguna competencia exclusivamente municipal, de los que siguen sobre la mesa cerca de un centenar que todavía no han podido ser ejecutados, algunos arrastrados desde las primeras semanas.
Por el contrario, dentro de las complejidades de la gestión de estos compromisos, muchos necesitados de numerosos informes o colaboración de otras administraciones, el gobierno liderado por Jesús Vázquez ha impulsado unos 50 y ha dado los pasos en otros para que puedan ver la luz antes de mayo de 2019.
Problemas en bucle
En el debe de los populares, emergen asuntos como la regulación del acceso al Casco Vello, donde siguen reinando unos bolardos sobre los que se ha debatido en numerosas ocasiones, con la unanimidad de la Corporación para cambiarlos por un sistema de cámaras, pero los problemas con la renovación de la concesión semafórica lo siguen impidiendo.
Espera también para ponerse en funcionamiento el sistema de control de horario para los trabajadores municipales, que no ha salido ni siquiera a concurso, así como el Plan de Emergencias Municipales (PEMU), que la oposición ha reivindicado en varias ocasiones.
En materia de infraestructuras, las complicaciones con el plan de obras dilatan la instalación de los primeros elevadores urbanos de la ciudad, en la Cruz Alta o Ervedelo, la mejora de viales en A Farixa o la reforma integral de parques como el Posío o la red de equipamientos para mascotas.
En materia social, la lucha contra el botellón ha centrado varios plenos. Pese a que se adoptó el compromiso de poner en marcha el programa Youth in Europe, este ni siquiera se ha contratado, por lo que la ordenanza para su erradicación está lejos de convertirse en realidad. Tampoco se han dotado fondos para colaborar con las comunidades de vecinos en la instalación de ascensores.
Logros
En el capítulo de méritos del gobierno municipal también hay cosas que anotar. El PP ha atendido las peticiones para configurar diferentes comisiones de investigación, como la del AVE, PXOM o legionella, mientras que ultima los trámites para poner en marcha dos sobre el departamento de Urbanismo. Sobre la alta velocidad, uno de los temas más debatidos, también se logró sacar adelante un plan estratégico para aprovechar su llegada.
Por otro lado, se han dado los pasos con la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para mejorar los márgenes de los ríos urbanos, con actuaciones en el Barbaña, o la depuración de Velle, cuyo proyecto se está redactando. En materia medioambiental, también se ha empezado a trabajar en As Madornas o en la contratación de la nueva empresa de las zonas verdes.
Las actuaciones impulsadas por los populares también han contribuido a mejorar la eficiencia energética del pabellón de Os Remedios, que se beneficiará de la obra ya contratada para renovar la canalización de agua desde As Burgas, consensuada en el pleno de abril de 2016.
La instalación de nuevos semáforos en los accesos al CHUO, las medidas para combatir la presencia de gas radón en dependencias municipales o la reducción del Impuesto de Bienes Inmuebles han sido otro de los asuntos que fueron tratados en el salón de plenos, punto de partida también para comenzar a diseñar el nuevo diseño de la movilidad en Ourense, primero con una mesa de trabajo y después con el Móvete por Ourense, o para impulsar proyectos realizados por otras administraciones, entre los que se incluyen la pista cubierta de atletismo de Expourense, ya a plena actividad.
La corporación actual se ha reunido 50 veces
A los 29 plenos que se realizan con periodicidad mensual, como fija el reglamento de las entidades locales, se ha unido la convocatoria de otros 20 con carácter extraordinario, por lo que la Corporación ya ha alcanzado las 50 citas en el salón plenario.
Aproximadamente, en cada sesión ordinaria, se debaten nueve mociones, al tener derecho cada grupo político, según lo acordado al inicio del mandato, a tres, a lo que hay que sumar los asuntos resolutivos impulsados por el grupo de gobierno, como las modificaciones de crédito.
