El Concello de la ciudad concedió ayer licencia al Sergas para la ampliación del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), que cuenta con un presupuesto de ejecución material de 40,2 millones de euros y que la Xunta ha tenido paralizada durante años.
El permiso municipal queda supeditado, no obstante, al pago de las tasas por licencias urbanísticas, que asciende a 483.305 euros. Asimismo, el ente local establece que no permitirá la ocupación de los edificios hasta que no esté realizada totalmente la urbanización que afecte a esta ampliación y hasta que se encuentren en condiciones de funcionamiento los suministros de agua, electricidad y saneamiento.
La licencia fue concedida en base al proyecto redactado por la unión temporal de empresas Aidhos Arquitec S.A.P. y GOC. La ampliación del CHUO está prevista en el área de reparto de la Finca Santamarina, cuyo proyecto de urbanización se encuentra recurrido en el Tribunal Superior de Xustiza después de que fuera anulado debido a la anulación del Plan Xeral de 2003. La junta de compensación ha encargado ya un nuevo proyecto basado en la ordenación urbanística provisional -cuyo diseño urbano es igual al planeamiento anulado-, lo que, unido a la crisis económica mantiene paralizada la urbanización de esta finca.
Ante esta situación, el Concello se compromete 'en aras do interese público' a ejecutar las obras de urbanización en lo que respecta a la ampliación del CHUO y después repercutir su coste -592.402 euros frente a los 15 millones que se estima costarán las obras de todo el área de reparto- a la junta de compensación.
La concesión de la licencia para la ampliación del CHUO sigue la normativa urbanística de proyectos singulares y estratégicos, que exigen un informe técnico visado por tres arquitectos y del que se dio cuenta en la última junta de Urbanismo, recibiendo los votos favorables de PSOE, BNG y PP y la abstención de DO.
La licencia fue concedida en base al proyecto redactado por la unión temporal de empresas Aidhos Arquitec S.A.P. y GOC. La ampliación del CHUO está prevista en el área de reparto de la Finca Santamarina, cuyo proyecto de urbanización se encuentra recurrido en el Tribunal Superior de Xustiza después de que fuera anulado debido a la anulación del Plan Xeral de 2003. La junta de compensación ha encargado ya un nuevo proyecto basado en la ordenación urbanística provisional -cuyo diseño urbano es igual al planeamiento anulado-, lo que, unido a la crisis económica mantiene paralizada la urbanización de esta finca.
Ante esta situación, el Concello se compromete 'en aras do interese público' a ejecutar las obras de urbanización en lo que respecta a la ampliación del CHUO y después repercutir su coste -592.402 euros frente a los 15 millones que se estima costarán las obras de todo el área de reparto- a la junta de compensación.
La concesión de la licencia para la ampliación del CHUO sigue la normativa urbanística de proyectos singulares y estratégicos, que exigen un informe técnico visado por tres arquitectos y del que se dio cuenta en la última junta de Urbanismo, recibiendo los votos favorables de PSOE, BNG y PP y la abstención de DO.
