Condenada la empleada de una guardería por pegar un azote a una niña de dos años

Una excuidadora de la guardería Pulgarcito de A Ponte fue juzgada ayer por azotar a una niña de dos años que estaba a su cuidado y que no quería comer. La denunciada, María Teresa Atanes Camiña, fue condenada a 60 días multa (360 euros en total) por un falta de lesiones, al tiempo que tendrá que pagar a la madre de la pequeña una indemnización de 760 euros en concepto de responsabilidad civil -con responsabilidad subsidiaria de la escuela infantil- por el daño moral causado y en virtud del tiempo en el que tardó en curar las heridas. Además, tendrá que abonar al Sergas 351 euros (el coste de la atención a la pequeña).

LOS HECHOS

Los hechos que sentaron ayer en el banquillo a la después condenada sucedieron el 26 de marzo del pasado año, cuando la niña estaba en el baño y vomitó al darle un vaso de agua para que tragara la comida que tenía en la boca. La denunciada le golpeó entonces con la palma de la mano en la nalga izquierda cuando le iba a limpiar. El hematoma tardó cinco días en curar.

El magistrado no creyó la versión dada por la cuidadora de que el cachete había sido un acto reflejo, sin intencionalidad. 'Para este juzgador no cabe ninguna duda del carácter intencional de la palmada, derivada de que la misma se produce como reproche a un hecho causal, el vómito de la menor, unido a la intensidad del golpe, como se evidencia en las fotos que constan en autos', asegura el magistrado en su sentencia.

En las fotos, de hecho, se ve claramente que sobre la piel de la niña quedaron marcados todos los dedos de la mano de la cuidadora.

El fallo, dado a conocer tras el juicio, establece una indemnización para los padres de la menor por 'la consternación, afectación física y preocupación intensa por el estado de la menor y de las posibles secuelas que en la misma puedan quedar'.

La Xunta de Galicia, como medida cautelar hasta que el caso penal se resolviese, apartó a la cuidadora de la atención directa con los niños.

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