A lo largo de las semanas previa a Nochebuena y Navidad, la rutina en los centros escolares se ve alterada.
El espumillón, los Reyes Magos y la estrella que los guía cuelgan de sus paredes mientras los más pequeños ensayan para representar obras de teatro, interpretar villancicos o alguna coreografía delante de sus padres. Pero este año algo ha cambiado. La mayoría de los centros públicos de Primaria de Ourense han suprimido la actividad del festival navideño abierto al público (padres y otros familiares) como forma de protesta frente a las medidas tomadas desde principio de curso por la Consellería de Educación, principalmente, por el aumento del horario lectivo de los profesores.
La decisión de suprimir actividades complementarias organizadas por los docentes ya fue tomada a comienzo del año académico por los respectivos claustros, pero esto no significa que se les hayan 'robado' la Navidad a los pequeños. En los centros que han optado por esta alternativa, entre los que se encuentran los de As Lagoas, Virxe de Covadonga, Vistahermosa, Mestre Vide o Mariñamansa, no han desterrado el espíritu de estas fechas. A nivel de aula, los tutores sí han realizado actividades con los niños que pusieron la nota de color e hicieron de estas jornadas días especiales. Los docente creen que, al renunciar a los actos colectivos y públicos, quizá se haga visible un trabajo que, consideran, no está valorado.
Algunos centros sí que han mantenido todas las actividades tradicionales de la Navidad. Sin embargo, esto no significa que no estén en contra de las medidas tomadas por la Consellería de Educación. Desde centros como el Curros Enriquez, José García Mende o el de Seixalbo, aseguran que no ha sido una decisión fácil de tomar, pero que, analizando los beneficios de estas actividades, optaron por continuar celebrando el tradicional festival abierto a familiares y amigos. Con todo, respetan la alternativa que han adoptado otros centros de la ciudad.
LOS PADRES
La presidenta de la Federación de asociaciones de padres y madres (Anpas) de Ourense, Sara Inés Vega, explica que no apoyan la supresión de actos y actividades lúdicas en los colegios, aunque también es consciente de los importantes cambios que han hecho desde la Consellería de Educación en esta materia. Con todo, las Anpas no creen que las medidas de presión de los profesores deban involucrar a los niños.
Estas decisiones han sido tomadas de forma individual por cada centro. El representante de CIG Ensino Xosé Manuel Alonso explica que el conjunto de los sindicatos no contempló esta medida de reivindicación, si bien respeta las decisiones de cada claustro y resaltó que 'trátase dun traballo que non está recoñecido, as veces parece que os profesores non queren traballar, que se queixan por facelo'.
FIN DE LA CLASES
Hoy se terminan las clases, se reciben las notas y comienzan las vacaciones. Los pequeños piensan en ultimar la carta a los Reyes en la que resaltarán lo buenos que han sido durante todo el año para, así, encontrarse el calcetín lleno de paquetes y juguetes con los que poder disfrutar de estos días libres. Mientras, los mayores seguirán pensando en la calidad de la educación pública y como poder garantizar que los niños de hoy, adultos de mañana, tengan la formación que se le supone a una sociedad moderna.
La decisión de suprimir actividades complementarias organizadas por los docentes ya fue tomada a comienzo del año académico por los respectivos claustros, pero esto no significa que se les hayan 'robado' la Navidad a los pequeños. En los centros que han optado por esta alternativa, entre los que se encuentran los de As Lagoas, Virxe de Covadonga, Vistahermosa, Mestre Vide o Mariñamansa, no han desterrado el espíritu de estas fechas. A nivel de aula, los tutores sí han realizado actividades con los niños que pusieron la nota de color e hicieron de estas jornadas días especiales. Los docente creen que, al renunciar a los actos colectivos y públicos, quizá se haga visible un trabajo que, consideran, no está valorado.
Algunos centros sí que han mantenido todas las actividades tradicionales de la Navidad. Sin embargo, esto no significa que no estén en contra de las medidas tomadas por la Consellería de Educación. Desde centros como el Curros Enriquez, José García Mende o el de Seixalbo, aseguran que no ha sido una decisión fácil de tomar, pero que, analizando los beneficios de estas actividades, optaron por continuar celebrando el tradicional festival abierto a familiares y amigos. Con todo, respetan la alternativa que han adoptado otros centros de la ciudad.
LOS PADRES
La presidenta de la Federación de asociaciones de padres y madres (Anpas) de Ourense, Sara Inés Vega, explica que no apoyan la supresión de actos y actividades lúdicas en los colegios, aunque también es consciente de los importantes cambios que han hecho desde la Consellería de Educación en esta materia. Con todo, las Anpas no creen que las medidas de presión de los profesores deban involucrar a los niños.
Estas decisiones han sido tomadas de forma individual por cada centro. El representante de CIG Ensino Xosé Manuel Alonso explica que el conjunto de los sindicatos no contempló esta medida de reivindicación, si bien respeta las decisiones de cada claustro y resaltó que 'trátase dun traballo que non está recoñecido, as veces parece que os profesores non queren traballar, que se queixan por facelo'.
FIN DE LA CLASES
Hoy se terminan las clases, se reciben las notas y comienzan las vacaciones. Los pequeños piensan en ultimar la carta a los Reyes en la que resaltarán lo buenos que han sido durante todo el año para, así, encontrarse el calcetín lleno de paquetes y juguetes con los que poder disfrutar de estos días libres. Mientras, los mayores seguirán pensando en la calidad de la educación pública y como poder garantizar que los niños de hoy, adultos de mañana, tengan la formación que se le supone a una sociedad moderna.
