INVESTIGACIONES POLICIALES

El crimen organizado se centra en la provincia en robos y prostitución

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photo_camera Herramientas incautadadas en la operación Tools.

Las fuerzas de seguridad desarticularon cuatro grupos criminales en agosto pero la media es de diez al cabo de un año

La robos con fuerza, asaltos en viviendas de ancianos, el tráfico de drogas o incluso los llamados hurtos “amorosos” son la especialización de la llamada delincuencia organizada que opera en la provincia. Aunque la actividad delictiva va incorporando nuevas modalidades. La última se destapó el pasado mes: la captación de menores para su explotación sexual en clubes de alterne puso a O Barco en el mapa de las organizaciones criminales.

Según el Ministerio del Interior, hasta 10 grupos de estas características actuaron el pasado año en la provincia. Y, aunque no son demasiados, resultan inquietantes por su forma de proceder -uso de la violencia- , porque están especializados en delitos graves y porque su carácter itinerante dificulta su investigación.

Durante el pasado mes de agosto, la Guardia Civil detuvo a 19 personas vinculadas a tres grupos criminales organizados que ya da por desarticulados.

Robos con fuerza

En la operación Tools, siete personas, seis de ellas rumanas y un marroquí, figuran como investigadas en un procedimiento judicial por 49 robos con fuerza cometidos desde el pasado 15 de enero en Muíños, Xinzo, Lobeira, Celanova, Calvos de Randín y localidades del norte de Portugal. Su modus operandi consistía en localizar durante el día las casas, normalmente segundas viviendas, y galpones para actuar por la noche tras forzar puertas y candados. 

Vendedores de ropa

También se le dio la categoría de grupo criminal a los tres detenidos, de nacionalidad lusa, en la operación Figo por 10 hurtos en A Merca, Coles, Verín y Celanova; un allanamiento de morada en A Merca y un robo violento en casa habitada en Lobeira. En su puesta en escena, cada uno de los integrante de la banda tenía un papel asignado: ofrecían ropa a vecinos del rural y mientras uno entretenía a la víctima otros entraban y se apoderaban del dinero. En este caso, el Instituto Armado no dio por concluida la operación.

Trata de seres humanos

Los nueve detenidos, dos en O Barco, en la operación Simpático permitió desarticular una organización dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual, corrupción de menores, agresión sexual y contra la salud pública.

Asaltos en domicilios

Asimismo, le sigue la pista (grupo activo) a los cuatro delincuentes (tres hombres y una mujer) que robaron 40.000 euros y joyas a un septuagenario de Vilamartín tras agredirlo en su propia casa a principios de agosto.

Hurtos cariñosos

La Policía Nacional de Ourense vincula las tramas organizadas que actúan en la ciudad con la delincuencia itinerante. Grupos organizados que, según explica a modo de ejemplo el comisario Antonio Álvarez Valencia, "hurtan al descuido por la mañana productos de cosmética en Vigo y por la tarde ya están en Ourense, desplazándose de un lugar a otro en furgonetas alquiladas".  
Una especialidad que simultanean con otra modalidad cada vez más popular: los hurtos cariñosos o amorosos (hurtos de joyas mediante abrazos). Una modalidad que dejó el ocho de agosto a L.L.F., un vecino de la ciudad de 84 años, sin un alhajas valoradas en 3.500 euros. Una mujer que decía ser francesa se ganó su confianza para, aprovechando un abrazo, sustraerle un reloj y una cadena de oro. Según fuentes policiales, la ladrona contó con apoyo logístico que le facilitó la huida.

El “bumping”

La entrada a domicilios particulares mediante el método bumping también es una táctica que revela la presencia de grupos organizados tras un hecho delictivo, según asegura Demetrio Martínez, el inspector jefe responsable de la Policía Judicial de la Comisaría de As Lagoas. Esta técnica, ya detectada desde hace meses en la ciudad, consiste en hacer saltar el bombín de la cerradura de la puerta. Para ello, se introduce una especie de llave maestra que, al darle un pequeño golpe en la parte superior, acciona los cilindros del bombín y permite el acceso fácil de los ladrones a la vivienda sin forzar la puerta. Y sin dejar rastro. De hecho, hay víctimas que no se percatan del robo hasta días después.

Precisamente, las bandas que roban en viviendas mediante ese método y que operan durante las mañanas son las que tienen más campo de acción en la ciudad. Por esa razón, según el comisario de Policía, los agentes se despliegan en operativos de vigilancia en diferentes zonas con el fin último de combatir la delincuencia itinerante que va en busca de oro y dinero. Hasta desprecian la plata, según Álvarez Valencia. La última de la que tiene constancia -añade el responsable policial- estuvo en la ciudad en el mes de junio y tras ocho robos cambiaron de ciudad.

Asaltos en bares

Este verano también detectaron a un grupo coruñés itinerante de cuatro personas, dos de ellas ya en prisión en el marco de la operación Roble, por robos en seis bares (en uno entraron dos veces) entre los días 22 de julio y 10 agosto. Según los investigadores, en la ejecución de los robos se apreciaba "una alta organización y coordinación, desarrollando cada uno de ellos una función, tanto en el exterior como en el interior del local". Uno vigilaba, los otros golpeaban los cristales hasta derribar la puerta para acceder todos a la "captura" en el interior.  Precisamente, la especialización y coordinación forman parte del ADN de los grupos criminales.

Zamburiña

A finales del pasado año, la unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional catalogó como trama organizada (hasta hizo un esquema con el papel de cada uno) a los 15 imputados en la llamada operación Zamburiña contra el tráfico de drogas en la que cuatro policías figuran como investigados por supuestamente revelar información policial a conocidos narcotraficantes que operaban en la ciudad.

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