La junta de gobierno local del Concello de Ourense acordó en la sesión celebrada esta semana conceder una licencia de obra al Seminario Diocesano de Ourense para una instalación fotovoltaica de autoconsumo, un plan que la Diócesis de Ourense ya tiene pensado desde 2020. La Diócesis, también afectada por la crisis energética y el alza de costes, se encamina cada vez más hacia la energía verde. Estos paneles que se situarán en la cubierta del inmueble, en la rúa Seminario, son solo uno de los ejemplos de la Iglesia ourensana en materia de cambio de hábitos.
Esta iniciativa para ahorrar costes con energía renovable no es la única que maneja el Obispado en materia de sostenibilidad. El objetivo también es obtener energía más barata en una “casa” que cuenta con casi un millar de parroquias dispersas por la ciudad y el rural ourensano.
Desde el 2020, el Obispado lleva trabajando en estrategias para que las actividades de la Iglesia sean completamente renovables, en la línea de utilizar la llamada “energía verde”. No solo es una iniciativa pionera en la Diócesis, sino a nivel nacional.
El Papa Francisco
El convenio realizado con una empresa para instalar paneles como los que tendrá el Seminario convierte a la Iglesia ourensana en pionera en la Iglesia española en tomar decisiones en sintonía con las recomendaciones del Papa Francisco en materia de sostenibilidad. De hecho, el máximo representante de la Iglesia católica es conocido como el “Papa verde” por su compromiso con el medio ambiente y el impulso de las energías renovables. En la actualidad, incluso va a protagonizar un documental sobre la que él llama “crisis ecológica”.
25 edificios
En Ourense, la Diócesis pretende cambiar el suministro para la utilización de energía en 25 edificios: la Catedral, la Casa de Ejercicios, el Centro de Conservación y Restauración San Martín, rectorales y varias parroquias están en este objetivo de utilizar energías verdes. A la Iglesia ourensana, en el mismo sentido que al Vaticano, les mueve el “criterio ético” para impulsar este cambio.
“El cuidado del medio ambiente es parte del ADN de la Iglesia católica”, destacó Raúl Alfonso González, delegado de Asuntos Económicos del Obispado, cuando se firmó el convenio para cambiar de energía. Las instituciones que dependen directamente del Obispado, como el Seminario o la Catedral de San Martiño, contarán con una energía totalmente limpia y el objetivo de la Diócesis es que se sumen a esta iniciativa todas sus parroquias.
La Diócesis de Ourense también estudia la implantación de proyectos de generación y autoconsumo con tecnología 100% renovable en edificios e instalaciones de la provincia. De momento, los paneles fotovoltaicos en el Seminario son un primer paso en su compromiso con la energía verde, tal y como demandó el Papa Francisco.
