Se coordina con los médicos de familia para facilitar la atenciñon a tantos pacientes mayores
El envejecimiento de la población convierte al servicio de Medicina Interna de los hospitales en el mayor consumidor de recursos sanitarios en una provincia como la de Ourense. Lo han puesto de manifiesto los internistas que ayer y hoy se reúnen en el encuentro anual de la Sociedad gallega de Medicina Interna, donde buscan otras opciones para mejorar la calidad de vida de sus ancianos pacientes -siempre crónicos y con múltiples insuficiencias- que eviten largos ingresos hospitalarios o la acumulación de fármacos cuya interacción acaba perjudicándolos.
José López Castro, presidente del comité organizador, ha hecho hincapié en el impacto que tiene el elevado envejecimiento de la población en Ourense, por lo que insta a la Administración a efectuar labores de prevención, que ayuden a mejorar la calidad de vida de los mayores. "Es costoso en principio", reconoce, pero a medio plazo es la solución para garantizar la sostenibilidad del sistema en provincias como la de Ourense, Zamora o Badajoz, aquejadas por la falta de relevo generacional, donde la población mayor, muy elevada en número, es muy prevalente en el servicio de Medicina Interna hospitalario.
Este hecho, por cierto, recalca el internista José Luis Jiménez, convierte al servicio en Ourense en un referente en Galicia, acostumbrado como está a la atención a los mayores, que suponen el 90% (los de más de 65 años) del total de enfermos que pasan por su servicio.
En la convención que se inició ayer 120 facultativos debaten sobre estas cuestiones y han presentado 100 comunicaciones, entre conferencias orales y posters; todo un listado de medidas a estudiar para reducir el impacto en el servicio por parte de esta parte de la población y mejorar la comunicación con Atención Primaria, básica para funcionar mejor. De hecho, recordaba ayer Jiménez, a su vez presidente del Colegio Médico, en Ourense cada internista tiene ya un centro de salud de la ciudad y otro de la provincia para atender consultas y asesorar a los médicos de familia, para evitar traslados innecesarios y ordenar la prescripción de fármacos, de forma que puedan eliminarse los innecesarios e inútiles.
La telemedicina
En ese contexto es en el que aparece la telemedicina, un asunto que será protagonista hoy de la sesión y que se considera una herramienta útil para resolver problemas clínicos sin desplazamiento de los pacientes. Según la ponencia presentada en este sentido, el grado de satisfacción de profesionales y pacientes es alto y la variabilidad en su uso por los médicos de Primaria es alta, por lo que aconseja que debería promocionarse.
A pesar de ser una herramienta novedosa, experiencia muestra (72.2% de los casos resueltos) que su uso es adecuado y útil, aunque aún debe mejorarse el formato electrónico para evitar disfunciones. La gran variabilidad en las patologías teleconsultadas, pone en valor la capacidad de integración y resolución de Medicina Interna como especialidad, también en el ámbito de las modalidades asistenciales no presenciales.
