Viajaban siete jóvenes en un Audi A-6 en el año 2010 y el conductor había bebido alcohol
El fatídico accidente de tráfico que conmocionó a O Barco en la madrugada del 14 de agosto de 2010, con un muerto y seis heridos, todos ellos muy jóvenes, que viajaban en un mismo coche, llegará a juicio el 2 de febrero del próximo año en el Penal 2. El ministerio fiscal reclama hasta cuatro años de prisión para Eduardo B.F (hoy tiene 28 años), el conductor del Audi A-6, por un homicidio imprudente y tres delitos de lesiones. En ese siniestro, perdió la vida Rodrigo T.D.G., de 22 , quien era el único hijo de Aurora D.G. y José Miguel T..
El fiscal acusa al conductor de imprudencia grave porque, según sostiene, el consumo previo de alcohol (habla de intoxicación etílica) mermaba sus capacidades y le impedía la conducción en las debidas condiciones de seguridad. De hecho, considera que esa fue la razón por la que "no pudo controlar el vehículo y se salió violentamente contra unas viñas para acabar volcando en la N-120". El vehículo recorrió unos 70 metros de viñedo antes de precipitarse por un talud, volar unos 10 metros, y caer sobre el firme de la N-120 (kilómetro 454).
Regresaban de un concierto
El accidente ocurrió a las 06,20 horas de la madrugada cuando los sietejóvenes, todos ellos amigos, regresaban a casa. De hecho, afrontaban un desplazamiento de poco más de dos kilómetros, los que separaban Vilanova, en donde se celebraba el Vilarock, hasta O Barco, en donde residían. En el momento en que el conductor perdió el control, el vehículo iba por el Camiño de Gulpiñeiras.
El inculpado fue sometido a una prueba de alcoholemia a las 10.00 horas, casi cuatro horas después del accidente, y arrojó un resultado de 0,40 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Pero el fiscal, realizando una extrapolación al momento del vuelco, atribuye una tasa real de 0,67 mg/l.
En este percance automovilístico, Eduardo R.M. salió mal parado. No en vano, el alta médica no le llegó hasta transcurridos 834 días. Según la acusación pública, el accidente le dejó graves secuelas, entre las que figura una incapacidad total.
Nair N.N. estuvo hospitalizado seis días por fracturas y policontusiones. Daniel R.T. sufrió la rotura de varias costillas, entre otras lesiones, que lo mantuvieron 18 días ingresdado. También resultaron heridos Oliver S.A. y Esteban R.R. renunciaron a cualquier indemnización que les pudiera corresponder.
El inculpado también se enfrente a la petición de pérdida de vigencia del permiso de conducir.
