La tercera ola mantiene en jaque a los hospitales gallegos, en los que aumenta la presión sobre ellos. Ayer se igualó la cifra de ingresados en todas las Unidades de Cuidados Intensivos de Galicia con 178 pacientes, los mismos del pasado 6 de abril. En Ourense mantiene la misma cifra (14), aunque suben aquellos que precisaron de asistencia sanitaria en planta hasta los 172. En total, los hospitales gallegos cuentan con 1.271 personas positivas por covid ingresadas.
La incidencia sobre los hospitales ha obligado al área sanitaria de Pontevedra a reprogramar sus operaciones quirúrgicas no urgentes, como ya sucedió en el resto salvo Lugo.
La provincia, en cuanto al número de casos positivos, vuelve a sufrir un nuevo ascenso con 218 nuevos contagios en la última jornada. La ciudad sigue siendo la más afectada con 987 contagiados -17 más que en la última jornada-, seguida de Xinzo con 227. La villa limiana baja diez casos, cuando se cumplen hoy una semana de la entrada en vigor de las máximas restricciones. Verín también desciende de 174 a 170, como Barbadás que pasa de 96 a 89, mientras que Allariz se mantiene igual en 123. El mayor ascenso lo experimenta Oímbra, tras el cribado celebrado el pasado martes, que alcanza los 70 positivos -12 más-.
29 fallecidos
La jornada de ayer fue trágica en cuanto a muertes, notificadas 29 desde el 22 de enero. El 26 de enero fallecieron en la provincia un hombre de 60 años hospitalizado en el CHUO, otro de 92 que procedía de las residencia Domus VI de Bande y dos mujeres, una de 87, también hospitalizada, y otra 96 que eran residentes del centro Quercus de Leiro. Del día de ayer se notificó la muerte de una mujer de 90 años en el CHUO.
