El gobierno municipal se ha marcado como fecha objetivo “tener un documento consensuado, en la medida de lo posible, a finales de abril”
En esa coyuntura, los grupos políticos de la Corporación municipal dicen que han comenzado a ponerse el mono de trabajo para sacar adelante un PXOM que ponga fin de una vez a la situación de incertidumbre urbanística.
El gobierno municipal se ha marcado como fecha objetivo “tener un documento consensuado, en la medida de lo posible, a finales de abril”. Los planes de José Cudeiro contemplan que la versión políticamente consensuada del PXOM sea derivada “en mayo” a la Xunta, para ser sometido al preceptivo informe ambiental. “En ese momento tiene que ir un documento ya consensuado”, recalca el edil, que señala que “es probable que tengamos que hacer alguna modificación tras esta evaluación”.
Bajo el condicionante de que el PP requerirá del apoyo de al menos una de las dos fuerzas mayoritarias de la oposición -DO o PSdeG- para sacar adelante el documento, el trabajo del resto de grupos se mantiene.
Los socialistas, bajo cuya gestión se elaboró el PXOM sobre el que se trabaja en estos momentos, se muestran receptivos a apoyar la puesta en marcha de un Plan que respete la esencia del que quedó redactado bajo la dirección de la exedil Áurea Soto. Sin embargo, el portavoz del PsdeG, José Ángel Vázquez Barquero, apelaba recientemente a la cautela, indicando que “todavía tenemos que recibir la información de los técnicos en lo referente a las alegaciones –entre las que estaban, además de centenares de propietarios individuales, las presentadas a los grupos por un conglomerado de colectivos liderado por la Asociación de Propietarios de Fincas Urbanas– y a los 11 puntos del PP”, tendentes a una mayor flexibilización que ahora, con el aval de los técnicos municipales y la nueva Lei do Solo, parece haberse conseguido.
Por parte de Democracia Ourensana, el trabajo de análisis prosigue, pero bajo la idea de que “tenemos otros interrogantes más importantes en estos momentos”, según indican desde la fuerza mayoritaria de la oposición, muy pendiente en los últimos días del futuro de la estación intermodal -que también habrá de integrarse, junto con su entorno, en el nuevo Plan-; o la variante exterior, comprometida pero a vueltas con los primeros trámites de las expropiaciones y pendiente de licitación, tanto en el primer tramo, de Seixalbo al túnel de Montealegre, como del segundo, desde este punto a la estación Empalme, por Oira y con un viaducto nuevo sobre el río. “No tendría sentido trabajar en un PXOM si no se sabe cómo va a llegar el AVE o qué expropiaciones habrá que hacer”, añaden fuentes del partido.
Ourense en Común, por su parte, mantuvo en las últimas semanas una serie de encuentros con los vecinos de los barrios de la ciudad para darles a conocer el proyecto, buscando combatir la que tachan de “falta de vontade por parte do goberno de non informar á cidadanía”. El portavoz de la formación asamblearia, Martiño Xosé Vázquez Mato, también se muestra a la espera de los cambios que se produzcan en el documento tras el estudio de los técnicos, “e logo someteremos a nova versión ao veredicto da asemblea”, para decidir así si emitirán un voto favorable, se abstendrán o se pronunciarán en contra.
