Las fuerzas de seguridad reforzarán la vigilancia en el monte con controles nocturnos, dos helicópteros, caballos y drones
Los sucesivos incendios en la provincia, pero sobre todo el registrado el pasado jueves en Verín que afectó a 1.371 hectáreas de monte raso y arbolado, ha encendido la alarma en el Comité de Coordinación Policial Antiincendios Forestales, cuyos responsables acordaron ayer reforzar la vigilancia en la provincia de Ourense y en el sur de la de Lugo.
En esta línea, lo primero que se acordó en la reunión del comité–integrado por fuerzas de seguridad y las administraciones estatales y autonómica– es desplazar al sur de Ourense a los agentes del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), una unidad de elite de la Guardia Civil que tiene su sede en la Comandancia de Pontevedra, para detener a los incendiarios. Pero no es la única medida de choque. Según el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, que presidió la reunión junto con la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, se reforzarán la vigilancia con controles de verificación de identidad en carreteras, pistas e incluso caminos. Además, los agentes estarán apoyados por dos helicópteros de la Guardia Civil, que hasta el momento tenían la base en A Coruña; patrullas a caballo y drones, que sobrevolarán continuamente las parroquias en que se registran más incendios. También se reforzará la presencia de militares de la Brilat en los montes ourensanos.
En toda Galicia hay 73 parroquias que registran más de siete fuegos cada año. De ellas, medio centenar pertenecen a la provincia de Ourense, situándose en la cabeza Lobás (O Carballiño), Quins (Melón) y A Corna (Piñor). Tras ellas aparecen diferentes zonas de Cualedro, Verín, Maceda y San Cristovo de Cea, A Gudiña y Cudeiro (Ourense).
En la actualidad, un total de 3.000 efectivos, entre guardias civiles, policías nacionales y autonómicos, se encargan de vigilar a los incendiarios e investigar los fuegos. El número de agentes se verá incrementado y, según Santiago Villanueva, no se va a escatimar recursos para poner a los incendiarios a disposición de la Justicia.
Detenidos e investigados
En la que va de año, las fuerzas de seguridad han detenido o investigado a 126 personas (58 en Ourense) por provocar incendios. El numero de imputados es ligeramente superior al de otros años, según el delegado del Gobierno, quien remarcó que ningún fuego de los que se registre en Galicia quedará sin investigar.
Por su parte, Ángeles Vázquez insistió en la "intencionalidade" de los incendios y puntualizó que el número de fuegos bajó "entre un 10% e un 15%" en julio con respecto a otros años, un tendencia que también, según dijo, se está manteniendo en lo que va de agosto.
En este sentido, la titular de Medio Rural reconoce que las condiciones son más adversas en lo tocante a temperatura y climatología y que la falta de lluvias y humedad en el ambiente provoca que los árboles ardan como "si se tratase de palla".
Las condiciones climatológicas ya han provocado que los fuegos calcinasen más de 2.000 hectáreas de monte ourensano en los primeros cuatro meses del año.
