Imaginemos un remoto valle, en un lugar cualquiera, donde tres monjas profesan sus votos en un pequeño convento. Sin embargo, su espíritu está a punto de tocar fondo, las tres monjas le piden al cielo una señal de que su vida monástica vale la pena. Pero el de arriba no da señales de vida. Tampoco la falta de pan y agua les ayuda a multiplicar su fe.
Esta es la trama que ayer presentó, en el Auditorio municipal el grupo de teatro noruego 'Jo Strømgren Kompani', a través de su obra 'El convento'. Su actuación, que se repite hoy pero con un montaje diferente, era especialmente esperada por los amantes del teatro, dada la calidad del grupo, que ha aceptado venir a Ourense, uno de los pocos lugares de España donde desarrolla su espectáculo.
Estas tres monjas sufrieron sobre las tablas un acelerado proceso de descreimiento, de hipocresía, de rivalidad, de deterioro ante las dificultades materiales y espirituales del camino elegido. Ello dio lugar a situaciones sorprendentes, enigmáticas e hilarantes.
El mensaje de la obra era claro: hacer un seguimiento de la sagrada verdad es una dura tarea y aún más cuando se tiene hambre.
Un enorme abanico de recursos actorales fue el que el grupo noruego utilizó, desde el mimo hasta el baile y el canto, así como un surtido ilimitado de efectos especiales de iluminación y sonido.
Como viene siendo costumbre, en la programación del Festival Internacional de Teatro de Ourense (Fito) la magia escénica vino por partido doble. Y es que ayer el Teatro Principal acogió la obra 'Umbral', del grupo valenciano 'Hongaresa'. La obra, interpretada por Lola López y Paco Zarzoso, bajo la dirección de Markus Spröstom, es una comedia en la que se aborda el conflicto del 'encuentro amoroso' desde cinco puntos de vista.
La jornada de ayer en el FITO se completó con un encuentro y posterior debate, a partir de las siete de la tarde, en la sala roja del Auditorio municipal, donde se dieron cita representantes de todos los festivales de teatro de Galicia.
LA CLAUSURA
El festival internacional de teatro finalizará el próximo domingo con teatro de calle, por la mañana en la calle del Paseo -a través del espectáculo 'Bon jour, bon jour', del grupo gallego Femme Fatale; por la tarde, se cierra el certamen con la actuació de la compañía vasca Ur, que pone en escena el espectácuño 'Sueño de una noche de verano'.
Estas tres monjas sufrieron sobre las tablas un acelerado proceso de descreimiento, de hipocresía, de rivalidad, de deterioro ante las dificultades materiales y espirituales del camino elegido. Ello dio lugar a situaciones sorprendentes, enigmáticas e hilarantes.
El mensaje de la obra era claro: hacer un seguimiento de la sagrada verdad es una dura tarea y aún más cuando se tiene hambre.
Un enorme abanico de recursos actorales fue el que el grupo noruego utilizó, desde el mimo hasta el baile y el canto, así como un surtido ilimitado de efectos especiales de iluminación y sonido.
Como viene siendo costumbre, en la programación del Festival Internacional de Teatro de Ourense (Fito) la magia escénica vino por partido doble. Y es que ayer el Teatro Principal acogió la obra 'Umbral', del grupo valenciano 'Hongaresa'. La obra, interpretada por Lola López y Paco Zarzoso, bajo la dirección de Markus Spröstom, es una comedia en la que se aborda el conflicto del 'encuentro amoroso' desde cinco puntos de vista.
La jornada de ayer en el FITO se completó con un encuentro y posterior debate, a partir de las siete de la tarde, en la sala roja del Auditorio municipal, donde se dieron cita representantes de todos los festivales de teatro de Galicia.
LA CLAUSURA
El festival internacional de teatro finalizará el próximo domingo con teatro de calle, por la mañana en la calle del Paseo -a través del espectáculo 'Bon jour, bon jour', del grupo gallego Femme Fatale; por la tarde, se cierra el certamen con la actuació de la compañía vasca Ur, que pone en escena el espectácuño 'Sueño de una noche de verano'.
