Dos jóvenes ourensanas, finalistas en un concurso nacional de ciencia

Al salir de clase, muchos alumnos prefieren cerrar los libros a seguir estudiando. Pero, ¿qué pasa cuando aprender también puede convertirse en un juego? María Gómez y Leyre Rodríguez, alumnas de 14 años del colegio Santa María “Maristas” de Ourense, encontraron en la competición científica Hi Score Science una afición en horario extraescolar. Lo que empezó siendo un pasatiempo, las convirtió hace días en finalistas del torneo online nacional, en el que participan desde estudiantes de Secundaria hasta profesores de universidad. En la sección juvenil, Gómez se llevó el primer puesto, y Rodríguez, el tercero. La liga, organizada por el Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea y el Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón -vinculados al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y a la Universidad de Zaragoza-, arrancó el pasado mes de septiembre. Las ourensanas ya habían participado el año pasado, pero decidieron volver a inscribirse. “Yo la conocí investigando en Instagram, me pareció interesante y quise apuntarme”, comenta Gómez. “A mí me avisó la madre de una amiga y me gustó la idea”, señala Rodríguez. La competición consiste en una prueba mensual, de septiembre a mayo, con diversas preguntas vinculadas al ámbito científico, desde biología a tecnología. “Suelo estar entre una hora y dos con cada prueba, pero como es una vez al mes no me supone mucho tiempo. Las preguntas me suelen gustar”, explica Gómez. Para ambas, la liga es un juego que les permite divertirse a la vez que aprender: “Algunas preguntas ya las sabía por el colegio y temas que había dado, otras por mi curiosidad…”. Al finalizar cada prueba, suelen anotar las dudas, para luego buscar más información. “Como es algo de fuera del colegio no les pregunto a los profesores, busco por mi cuenta”, asegura Gómez. “Aprendo de forma autodidacta”, añade su compañera. Hace días, a las dos les sorprendió la clasificación final. Gómez resultó séptima en la liga absoluta y primera en la juvenil, y Rodríguez, undécima en la general y tercera entre los jóvenes. “Me hizo mucha ilusión, no pensé que fuese a quedar en tan buena posición”, reconoce Gómez. “Fue una sorpresa”, dice Rodríguez. En septiembre volverán a inscribirse en la competición, a la vez que empiezan el último curso de Secundaria. Aunque todavía faltan años, ambas se decantan por las carreras científicas. “A mí me gustaría estudiar matemáticas”, señala Gómez. “Yo querría hacer Medicina”, apunta Rodríguez.