Dos madres de la ciudad, Inmaculada Ferreira y Ana Jiménez, llevan días reclamando en la fetatura territorial de Educación un cuidador que se encarga de atender a sus hijos de nueve y cino años en el comedor del colegio público Irmáns Villar de la ciudad.
La falta de cuidador les obliga a tener que recoger todos los días sobre las dos de la tarde a los dos menores para darles de comer en casa y volver a llevarlos a clase sobre las cuatro de la tarde. Los dos niños tiene una deficiencia que les impide valerse por sí mismos y 'no podemos recogerlos todos los días porque, en mi caso, tengo otros familiares enfermos, a los que tengo también que dar de comer', aseguró Inmaculada Ferreira.
Las dos aseguran que los menores no tienen ningún problema durante las clases, dado que un cuidador se ocupa de ellos. 'El problema es a la hora de comer', afirma Ana Jiménez, recalcando que ella misma se apuntó de voluntaria para dar la comida a su hijo sin tener que llevarlo a casa, 'pero no me quisieron. Dicen que no tengo la preparación suficiente', asegura. Los dos menores sí tuvieron cuidador en años anteriores. Ayer en la Delegación de la Consellería de Educación aseguraban desconocer la problemática de los dos escolares, alegando que el reparto de cuidadores escolares se hace siguiendo un informe de los inspectores del centro educativo. Mientras, en el colegio declinaron pronunciarse sobre la situación.
Las dos aseguran que los menores no tienen ningún problema durante las clases, dado que un cuidador se ocupa de ellos. 'El problema es a la hora de comer', afirma Ana Jiménez, recalcando que ella misma se apuntó de voluntaria para dar la comida a su hijo sin tener que llevarlo a casa, 'pero no me quisieron. Dicen que no tengo la preparación suficiente', asegura. Los dos menores sí tuvieron cuidador en años anteriores. Ayer en la Delegación de la Consellería de Educación aseguraban desconocer la problemática de los dos escolares, alegando que el reparto de cuidadores escolares se hace siguiendo un informe de los inspectores del centro educativo. Mientras, en el colegio declinaron pronunciarse sobre la situación.
