Luís Villares pide a la Xunta que no haga "oídos xordos" y los nacionalistas estarán "viaxantes" ante la adjudicación
El portavoz de En Marea, Luís Villares, reclamó ayer en Ourense que la Xunta atienda la "demanda unánime" de realizar "axustes" en el nuevo Plan de Transporte de viajeros por carretera. "Estamos a tempo de facer axustes no plan, non podemos esperar a que isto se consolide e que a xente dea por perdido o costume de usar o transporte público e opte polo privado", aseguró.
Villares apuntó a que podría de tratarse de "parte da estratexia constante do PP", que definió como "redución do servizo ata facelo inasequible, imposible e notoriamente molesto de tal xeito que deixe de ter demanda para pechalo".
Villares pidió a la Xunta que deje de hacer "oídos xordos a unha demanda unánime", que atribuye tanto al sector del transporte como a los usuarios y destacó que hay "necesidades reais dos concellos que non están a ser atendidas".
El parlamentario de En Marea Davide Rodríguez afirmó que estarán "vixiantes" ante el desarrollo del plan, aunque ve "complicada" la solución, porque "o PP chegou tarde", subrayó.
Por su parte, el BNG mostró ayer su oposición al plan y lo vinculó a "intereses ocultos. Los nacionalistas han pedido toda la documentación de las adjudicaciones, y estarán "vixiantes" para que los criterios empleados se sometan a una auditoría, al considerar que deberían ser "públicos" y "accesibles".
La diputada Noa Presas incidió en los problema de la provincia, donde el transporte es "unha necesidade". La nacionalista criticó los "problemas de conectividade" de las nuevas rutas con hospitales como el de Valdeorras y cuya "solución", dijo, fue "manter o horario que había antes". n
