"Ourense, a provincia termal" alcanza un desarrollo del 70%; mientras en el olvido se quedó un proyecto de 72 millones
El Plan "Ourense, a provincia Termal" 2014-2020, firmado por Xunta y Diputación, es la única iniciativa que en la actualidad parece dar pasos adelante. Fue presentado hace ya cuatro años con los retos de ofrecer "especialización, nuevos productos, modernas infraestructuras y promoción", con un presupuesto inicial de 94 millones de euros. El objetivo es situar a la provincia de Ourense en el mapa internacional del termalismo. Desde el gobierno provincial consideran que está cumplido el 70% de lo previsto tanto en medidas ejecutadas como las que están en marcha. Sin embargo, la ausencia de ese gran complejo de lujo sigue siendo la espinita clavada que, de momento, aleja las perspectivas de alcanzar el 100% de esta hoja de ruta.
En 2017, se reforzó una línea de Renfe para los balnearios, el denominado "Tren Balnearios", que incluye estancias termales de seis días con desplazamiento en tren a Ourense desde más de 40 ciudades de toda España y el traslado desde las estación hasta el balneario. Además, se reabrió el balneario de Caldas de Partovia, principalmente con capital privado.
Entre las previsiones, se espera lanzar a lo largo de 2018 una cooperación para abrir el Balneario de Verán. Todo este desarrollo previsto, "ten moita relación coa chegada da alta velocidade a Ourense, xa que vai supór un antes e un despois en Ourense", recuerda Baltar.
Mientras esta planificación sigue adelante, en el olvido queda el Plan Estratéxico Termal lanzado en la época del bipartito municipal, y diseñado también por el equipo que desarrolló este "Ourense, a provincia termal". En aquel plan se preveían grandes infraestructuras en la ribera del Miño por valor de 72 millones de euros y en el que uno de los ejes principales que se señalaba era el traslado del matadero municipal para liberar los terrenos.
INSPIRACIÓN JAPONESA
La punta de lanza de aquel plan era una serie de complejos hoteleros y de ocio en la zona que complementaría a las piscinas termales de A Chavasqueira. Un centro temático denominado Mundo Termal con sala de exposiciones y centro comercial; la construcción de "Ryokan", un alojamiento de inspiración japonesa, de 50 habitaciones y con tres estrellas; un hotel de congresos y deportivo de 200 habitaciones, y la creación de un área residencial y el gran Parque da Ribeira. Esto vendría acompañado de nuevos aparcamientos y la construcción de pasarelas para conectar todas las infraestructuras termales.
