La plataforma de la N-525 traslada su plan a Fomento

photo_camera Antonio González, portavoz socialista de A Peroxa; Benito Bouzada, de Stop Accidentes; María López, portavoz de la plataforma de la N-525; Manuel Rodríguez, alcalde socialista de Coles y Rafael Villarino, alcalde socialista de Amoeiro.

La asociación, con el apoyo político de Coles, Amoeiro, A Peroxa y Vilamarín, pide cambios en el firme y una mediana entre O Viso y Gustei

La plataforma por la seguridad en la N-525, compuesta por vecinos de Coles, Amoeiro, Vilamarín y A Peroxa, registró ayer un escrito en el que insta al Ministerio de Fomento la mejora de la seguridad en el tramo que une Ourense y Cambeo. Una de sus principales reclamaciones, recogidas en el escrito presentado ayer, ante la Delegación de Carreteras en Ourense, es la instalación de una mediana que separe el carril en dirección a Ourense de los dos en sentido Santiago para evitar impactos frontales como el que sufrió Lara María López Castro, portavoz de la plataforma, el 25 de marzo de 2014, en el que murió su suegra. "Cando despertei, propúxenme que a miña sogra fose a última víctima nesta estrada e así foi", explicó.

Los miembros de la plataforma, que cuentan con el apoyo de Stop Accidentes, también reclaman un cambio en el firme, que debe ser antideslizante así como obras de mantenimiento en arcenes y cunetas para evitar la presencia de agua en el asfalto. Precisamente, este tramo se convierte en extremadamente peligroso para los conductores durante los días de lluvia debido a la gran cantidad de agua que discurre por el asfaltado.

Otra de sus propuestas es mejorar el acceso al centro escolar de Cambeo a vehículos particulares, autobuses y peatones que cruzan la carretera en este punto sin ningún paso habilitado para ello. También, la creación de carriles de servicio de acceso y salida en las zonas industriales para que los conductores no se incorporen directamente al vial en zonas donde la visibilidad es escasa o nula. Por otra parte, la plataforma considera que las medidas ya adoptadas en el vial como fueron la instalación de radares y la reducción de la velocidad a 70 kilómetros horas solo tienen un afán recaudatorio. "O control da velocidade está ben pero non é a solución. Eu sigo dicindo que o meu accidente foi a menos de 70", explicó la portavoz..

El escrito recoge la peticiones formuladas por los responsables de los concellos que apoyaron la reunión del pasado 22 de enero en la localidad de Vilarchao, en Coles. Su objetivo es, en definitiva, reducir el elevado índice de siniestralidad de este trayecto considerado ya como punto negro de accidente. "De momento, contamos co apoio de 30 persoas e dos catro concellos. Neste caso, non importa a cor política", concluyó María López.

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