EN EL CENTRO DE LA CIUDAD

La policía investiga cuatro robos a comercios en una hora

photo_camera Este establecimiento fue el más afectado por la oleada de robos. (MIGUEL ÁNGEL)

En una tienda con ropa deportiva de la calle Cardenal Quevedo se llevaron 2.200 euros en efectivo 

La Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la brigada provincial de la Policía Judicial investiga los cuatro robos (uno en grado de tentativa) que se perpetraron en la madrugada del sábado en solo una hora. Todos los robos tuvieron como escenario conocidos comercios de la zona centro, salvo el acontecido en el Telepizza de la calle Ervedelo esquina con Dalí, en O Couto.

La policía no cree que todos estos asaltos compartan autoría, pero sí que en alguno de ellos participaron al menos cuatro personas. Así lo muestran la imágenes -no nítidas- recogidas por las cámaras de seguridad de The Room Concept Store, en la calle Concordia. Cuatro individuos, según confirmaba ayer su propietario, José Cid, intentaron violentar la puerta metálica, pero no pudieron debido al peso. La alarma sonó a las 04,20 horas de la noche. Sólo una semana antes, dos individuos intentaron forzar la puerta.

Todos los robos se cometieron entre las 03,50 y las 04.50, según confirmó la Policía Nacional a este diario. Otro de los denunciantes fue el propietario de la cafetería Baden Baden, en la plaza de Paz Nóvoa, en donde se apoderaron de 300 euros, según fuentes policiales. En este caso, los investigadores sólo tienen constancia de un único ladrón.

En el periplo, también aparece una tienda de ropa deportiva en el número 12 de la calle Cardenal Quevedo. Los autores se apoderaron de un jugoso botín, 2.200 euros en efectivo, además de provocar destrozos en la persiana exterior, que descarrilaron, y la puerta de entrada.

La última parada fue el Telepizza de la calle Ervedelo, en O Couto. En este negocio, según confirmaron los empleados, entraron al interior tras hacer palanca en un puerta con cristal de seguridad. En el local, aparecieron los cajones revueltos y la caja registradora destrozada en el suelo, pero no consiguieron dinero en metálico, ya que el establecimiento estaba sin efectivo y comenzó a sonar la alarma.

La policía cree que se trata de delincuentes de la ciudad, descartando la presencia de bandas foráneas. En estos momentos está analizando las imágenes recogidas por las cámaras de seguridad.

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