La vendimia se retrasará en O Ribeiro y Monterrei y las condiciones atmosféricas del próximo mes definirán la calidad

Las tormentas de julio merman la cosecha de uva de la provincia

La difícil climatología del mes de julio obligará a retrasar la vendimia en buena parte de la provincia.  (Foto: MARTIÑO PINAL)
A algo más de un mes para que comiencen las vendimias, las expectativas en las cuatro denominaciones de origen de la provincia -Ribeiro, Monterrei, Ribeira Sacra y Valdeorras- no son excesivamente optimistas en lo que a volumen se refiere.
La climatología va a condicionar de forma notable tanto la producción como la calidad de la uva y a esto hay que sumar la decisión de la zona de Ribeira Sacra de reducir la producción en un diez por ciento. En este contexto, la producción de 2012, que se situó en torno a los 25,4 millones de kilos de uva, se verá sensiblemente mermada, aunque nadie se atreve a aventurar en estos momentos un porcentaje.

Las tormentas de granizo que se repitieron en distintos puntos de la provincia van a tener una incidencia decisiva en la cantidad de uva recogida. Así se hace constar desde las denominaciones de Ribeiro y Valdeorras y en la primera, además, la vendimia se retrasará.

En la Denominación Monterrei la climatología también afectará a la cosecha, ya que hasta el momento no fue la deseada por los viticultores y retrasará la vendimia en unos 15 días con respecto a las fechas habituales.

Mientras, en la Ribeira Sacra la producción se reducirá en un 10%, según decidió el Consejo Regulador, tanto para equilibrar el almacenamiento como en un esfuerzo para elevar la calidad.


CALIDAD DE LA COSECHA

Con respecto a la calidad de la cosecha, coincidencia en las tres denominaciones: es demasiado pronto para aventurarla. Dependerá del tiempo reinante durante el mes previo a la vendimia. Si ésta es la aguardada, la calidad será 'buena', como reconoce el presidente del Consejo de la Denominación Ribeira Sacra.

Sin embargo, en la zona de Valdeorras se teme que el efecto de las tormentas de granizo en el producto final afecte a la calidad final de la uva.


MENOS RECOGIDA

A la reducción de la cosecha provocada por las tormentas o la decidida por el Consello en la Ribeira Sacra, se suma la decisión de comprar menos uva adoptada por algunas bodegas que aún almacena importantes cantidades de cosechas pasadas. Así, la dirección de Bodegas Arnoya explicaba ayer, tal y como desveló el sindicato Unións Agrarias, que de cara a la próxima cosecha van a reducir la adquisición de uva, estiman que en un 30% de lo adquirido el año pasado.

Según la dirección de Arnoya, la empresa está comunicando a parte de sus productores que no les puede recoger la uva este año. 'Son productores que se incorporaron en los últimos años, porque había mucha producción y no le cogían la uva en otras bodegas, pero este año nos es totalmente imposible', dado el excedente acumulado.

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