Las precipitaciones ralentizan la recogida de la uva, que se intensificará el fin de semana
O Ribeiro inicia la vendimia pero muy lentamente. Las últimas lluvias ralentizan los trabajos, que se prevén más intensos durante el próximo fin de semana. Pocas bodegas abrieron ayer sus puertas, ya que del total de 19 que hay en la actualidad empezaron la Cooperativa Vitivinícola, Campante, Ramón do Casar, Pazo Casanova y César García, y de 83 "colleiteiros" lo han hecho 11, para recibir los racimos más maduros, mientras el resto se reserva para los próximos días. El Consello Regulador ha enviado los inspectores necesarios para realizar el control de la entrada de uva en todas las bodegas que ya recogen carga.
El director técnico del Consello Regulador da Denominación de Orixe Ribeiro, Pablo Vidal, declaraba que por el momento la lluvia no ha afectado en absoluto a la uva, aunque si se mantienen las condiciones adversas dentro de un par de días podría retrasar la maduración o variar el grado de acidez, e incluso verse dañada por la botritis, que provoca la podredumbre. Por ese motivo, los productores llevan a cabo una recogida seleccionada, limitándose ayer y hoy a los racimos más maduros de las variedades autóctonas torrontés, que es la que antes madura, y treixadura.
La propia Cooperativa, que cuenta con 500 socios y 400 proveedores, ha concedido este año dos días cero (ayer y hoy), que así se denomina a esta recogida selectiva, en la que incluye también la uva destinada a producir su tostado, retrasando el inicio del trabajo más intenso hasta el 19 de septiembre y con la intención de prolongar la vendimia hasta el 2 de octubre para que la cosecha disponga de más tiempo para su óptima maduración.
Para estos trabajos, la Cooperativa ha contratado temporalmente a 30 trabajadores, aunque prevé llegar a los 40 durante el grueso de la vendimia, que podría sumar en torno a los 200 vendimiadores en toda la denominación, aunque la mayoría de los productores recurren a familiares para evitar gastos. El Consello Regulador de esta denominación calcula que en esta campaña se alcanzarán los 15.000.000 kilos, que es la media anual, y califica la cosecha de excelente.
En Monterrei
La vendimia en Monterrei comenzó el pasado viernes con las bodegas Tabú y Ladairo, y a lo largo del fin de semana se le fueron incorporando Crego e Monaguillo, Rubén Delgado, Gargalo, Pazos del Rey y Terras do Cigarrón. "Las expectativas son buenas,la uva se encuentra en muy buen estado fitosanitario", asegura Miguel López, director técnico del Consello Regulador, que subraya que a lo largo de esta semana y la que viene se irán sumando el resto de bodegas hasta completar las 24 que actualmente integran la denominación. "Si el tiempo lo permite, alargaremos la campaña, pero si persisten las lluvias, como parece, no quedará más remedio que acortar los tiempos", reconocía López.
Las previsiones en Monterrei pasan por superar las cifras del año pasado, cuando se recogieron 2,3 millones de kilos. "Confiamos en lograr los 2,5 o incluso tres", matizó. En cuanto al resultado final de la cosecha, apuntó que se "prevé un vino muy equilibrado, con un alto potencial aromático y un buen equilibrio entre alcohol y acidez".
En estas primeras jornadas de vendimia ya han entrado en las bodegas 100.000 kilogramos de uva, principalmente de la variedad godello en blanco y mencía en tinto. "Son las primeras en vendimiar y también de las que más cantidad de uva se recogen", concluía.
