Apenas unos días después de aprobarse la prohibición de las corridas de toros en Cataluña, la polémica sigue viva y enfrentando a aficionados y detractores por todo el territorio nacional.
En Barcelona, taurinos y anti taurinos se concentraban ayer domingo a las puertas de la plaza Monumenta, poco antes de la primera corrida que se celebró en Cataluña tras la prohibición del Parlament. Los dos bandos se enfrentaron verbalmente bajo el control de una brigada móvil de los Mossos d'Esquadra desplazada al lugar 'como medida de prevención y aunque no se espera ningún altercado', según fuentes policiales. Los taurinos portaban pancartas escritas sobre banderas de Cataluña en las que se podía leer, entre otros lemas, 'Libertad'.
Las protestas también han cruzado el Mediterráneo hasta Mallorca, donde otro grupo de defensores de los animales protestaron con gritos de 'Basta ya' ante la plaza de toros de Inca en los prolegómenos de una corrida de toros y advirtieron de que 'No pararemos hasta su abolición'.
Ismael López, coordinador de 'Animanaturalis' en Palma, una de las asociaciones organizadoras de la protesta, que añadió que la concentración -sexta de este verano- 'ha sido la más numerosa'. López achacado este 'éxito sin precedentes' al impulso social que, a su juicio, ha tenido la aprobación por parte del Parlament catalán. 'Con esto conseguimos informar a los extranjeros; algunos ya ni entran al entender qué se trata, de matar al toro. Otros entran con curiosidad, y hemos visto ya a muchos salir tras el primer toro, llorando', ha asegurado López.
En Euskadi, la consejera de Educación, Isabel Celáa, afirmó que el Ejecutivo vasco no tiene previsto 'de momento' presentar ninguna iniciativa para debatir sobre la prohibición de las corridas de toros. Celáa recordó que 'Gipuzkoa es un territorio con cuatro plazas de toros importantes y en todo caso no nos gusta mezclar esta fiesta con la política'. Un sondeo de Metroscopia aseguraba ayer que al 60% de los españoles no le gustan los toros, frente a un 37% que sí se declaran aficionado. Sin embargo, la mayoría de los encuestados no estaban de acuerdo con la prohibición del Parlamento de Cataluña. El 57% de los encuestados se mostraba en desacuerdo y un 12% no se muestra ni de acuerdo ni en desacuerdo. Además, un 58 por ciento de los ciudadanos considera que el rechazo en Cataluña tiene que ver con la identificación de las corridas como una fiesta exclusivamente española.
Ajenos a la polémica, otros festejos taurinos, como los toros embolados. La noche del sábado al domingo moría un hombre de 46 años en Godella (Valencia) al sufrir heridas graves en el cuello con el sistema de anclaje de las bolas de fuego del toro.
Las protestas también han cruzado el Mediterráneo hasta Mallorca, donde otro grupo de defensores de los animales protestaron con gritos de 'Basta ya' ante la plaza de toros de Inca en los prolegómenos de una corrida de toros y advirtieron de que 'No pararemos hasta su abolición'.
Ismael López, coordinador de 'Animanaturalis' en Palma, una de las asociaciones organizadoras de la protesta, que añadió que la concentración -sexta de este verano- 'ha sido la más numerosa'. López achacado este 'éxito sin precedentes' al impulso social que, a su juicio, ha tenido la aprobación por parte del Parlament catalán. 'Con esto conseguimos informar a los extranjeros; algunos ya ni entran al entender qué se trata, de matar al toro. Otros entran con curiosidad, y hemos visto ya a muchos salir tras el primer toro, llorando', ha asegurado López.
En Euskadi, la consejera de Educación, Isabel Celáa, afirmó que el Ejecutivo vasco no tiene previsto 'de momento' presentar ninguna iniciativa para debatir sobre la prohibición de las corridas de toros. Celáa recordó que 'Gipuzkoa es un territorio con cuatro plazas de toros importantes y en todo caso no nos gusta mezclar esta fiesta con la política'. Un sondeo de Metroscopia aseguraba ayer que al 60% de los españoles no le gustan los toros, frente a un 37% que sí se declaran aficionado. Sin embargo, la mayoría de los encuestados no estaban de acuerdo con la prohibición del Parlamento de Cataluña. El 57% de los encuestados se mostraba en desacuerdo y un 12% no se muestra ni de acuerdo ni en desacuerdo. Además, un 58 por ciento de los ciudadanos considera que el rechazo en Cataluña tiene que ver con la identificación de las corridas como una fiesta exclusivamente española.
Ajenos a la polémica, otros festejos taurinos, como los toros embolados. La noche del sábado al domingo moría un hombre de 46 años en Godella (Valencia) al sufrir heridas graves en el cuello con el sistema de anclaje de las bolas de fuego del toro.
