Los fallecidos, jugadores de fútbol, se desplazaban a Ponferrada con dos amigos, heridos leves

Dos jóvenes de O Barco mueren al salirse su coche de la calzada tras cruzárseles un perro

Un agente de Tráfico regula la circulación en el lugar del accidente. Tras él, el coche y uno de los cadáveres sobre la calzada. (Foto: Daniel)
Dos jóvenes de O Barco muertos, Iván Sierra Neira y Saúl Calleja Benéitez, de 16 y 18 años, respectivamente, y otros dos heridos leves es el saldo del accidente de tráfico ocurrido en el kilómetro 396 de la carretera N-VI, a la altura del ayuntamiento berciano de Carracedelo. El turismo Renault Laguna en el que viajaban se salió de la calzada tras atropellar un perro que se cruzó en su camino. El vehículo chocó contra un talud y volcó sobre la carretera, según apuntaron fuentes de la Guardia Civil de León.
La inesperada aparición de un perro en medio de la carretera provocó ayer un trágico accidente de tráfico que causó la muerte de dos jóvenes de O Barco: Saúl Calleja Benéitez e Iván Sierra Neira, de 18 y 16 años, respectivamente. Ambos viajaban de ocupantes en el turismo que conducía Adrián V.P., de 19 años. Tanto éste como el cuarto ocupante del vehículo, Damián L.F., de 17, sufrieron lesiones de carácter leve, tal y como apuntaron fuentes de la Guardia Civil de León.

El suceso ocurrió a las 16,40 horas, cuando los cuatro jóvenes viajaban a la capital del Bierzo, Ponferrada, para recoger a un amigo y traerlo a las ‘Festas de Santa Rita’ de O Barco.

No pudo ser. Un perro de considerables dimensiones se cruzó en el camino del Renault Laguna de matrícula M-0599-WC en el que viajaban, provocando su salida de la calzada. Tras chocar con el talud, el vehículo volcó sobre la carretera, dejando atrapados a sus ocupantes.

Inmediatamente, el Servicio de Emergencias 112 de Castilla y León movilizaba hasta el lugar del accidente un helicóptero medicalizado (que al final no tuvo que intervenir), una Unidad móvil de Emergencias (UME), una ambulancia de soporte vital básico, a un equipo del Punto de Atención Continuada (PAC) de Cacabelos, a los Bomberos de Ponferrada y a la Guardia Civil.

Debido al estado en que quedó el turismo, los bomberos tuvieron que utilizar los equipos de excarcelación para rescatar a los jóvenes fallecidos. Aunque uno de ellos aún estaba con vida cuando llegaron los Servicios de Emergencia, los intentos de reanimación realizados durante prácticamente una hora no consiguieron impedir su muerte.

Los cuerpos de los fallecidos fueron levantados por dos funerarias bercianas y llevados al Hospital del Bierzo, donde les realizarán la autopsia a partir de las 10.00 horas de hoy. Posteriormente, serán trasladados a la villa barquense, donde se calcula que llegarán a partir de las 14.00 horas.

También fueron llevados al hospital de Ponferrada los dos jóvenes heridos, aunque las lesiones sufridas no revisten excesiva gravedad, según las fuentes consultadas.

Los dos fallecidos tenían relación con el Centro de Deportes Barco. Iván Sierra Neira jugó su último encuentro con los juveniles el pasado viernes. Saúl Calleja perteneció a esa misma plantilla hasta el año pasado. Esta circunstancia hizo que una representación del club bar quense se desplazase hasta la ciudad berciana, según apuntaron fuentes del equipo.

El accidente provocó una fuerte consternación en la villa barquense, donde circularon numerosos comentarios acerca de las causas del trágico siniestro y de sus ocupantes. Esta inquietud aumentó cuando se barajó la noticia, sin fundamento, de que podrían ser hasta cinco los jóvenes que viajaban y que dos habían resultado ilesos. Esta posibilidad fue descartada rotundamente por la Guardia Civil de León.

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