El organigrama del personal del Concello de O Barco superó ayer un nuevo trámite, al rechazar el PSOE las alegaciones en contra del tesorero y de un administrativo, que se suman a los informes contrarios de Secretaría e Intervención.
A los informes contrarios de Secretaría e Intervención contra el organigrama del personal del Concello de O Barco se sumaron ayer las alegaciones del tesorero y del secretario de la Comisión de Facenda. Los dos primeros documentos fueron rechazados por el pleno de octubre, siendo desestimadas las citadas alegaciones ayer por la Comisión de Personal, al aprobar un informe de la Universidad de Santiago de Compostela. Ambas votaciones salieron adelante con el respaldo socialista, optando por la abstención los ediles populares y la concejal del BNG.
La alegación del tesorero municipal recuerda que las corporaciones locales tienen la obligación de redactar una Relación de Postos de Traballo (RTP), cuyos contenidos mínimos no reúne el organigrama aprobado en O Barco. El informe de la Universidad de Santiago estima totalmente razoable la petición, pero la rechaza porque no fue fijado ningún plazo para cumplir la normativa.
El tesorero no es el único que recuerda la necesidad de la Relación de Puestos de Trabajo, que también solicita un informe de la Secretaría municipal de O Barco, contrario al organigrama. El secretario dice que la relación de puestos de trabajo aprobada no indica la titulación exigida para el desempeño de cada puesto de trabajo, su sistema de provisión ni sus retribuciones complementarias.
Secretaría avisa que hay varios puestos de trabajo que, por el contenido de sus funciones, deberían ser ocupados por personal funcionario y no por personal laboral, como refleja el organigrama. Además, recuerda la obligatoriedad de pertenecer o al personal funcionario o al laboral fijo del Concello para estar en su organigrama, un requisito que no reúnen al menos 50 trabajadores.
Este medio centenar de empleados municipales aparece relacionado en el apartado de consolidación de empleo temporal, que el Concello pretende realizar dejando as prazas na situación actual ata a xubilación ou baixa voluntaria. El secretario se opone a esta opción y plantea iniciar un proceso de consolidación que valore la antigüedad de la relación laboral con el Concello.
Las otras dos alegaciones presentadas por el tesorero tienen un carácter más técnico, al igual que sucede con la del secretario de la Comisión de Facenda.
La alegación del tesorero municipal recuerda que las corporaciones locales tienen la obligación de redactar una Relación de Postos de Traballo (RTP), cuyos contenidos mínimos no reúne el organigrama aprobado en O Barco. El informe de la Universidad de Santiago estima totalmente razoable la petición, pero la rechaza porque no fue fijado ningún plazo para cumplir la normativa.
El tesorero no es el único que recuerda la necesidad de la Relación de Puestos de Trabajo, que también solicita un informe de la Secretaría municipal de O Barco, contrario al organigrama. El secretario dice que la relación de puestos de trabajo aprobada no indica la titulación exigida para el desempeño de cada puesto de trabajo, su sistema de provisión ni sus retribuciones complementarias.
Secretaría avisa que hay varios puestos de trabajo que, por el contenido de sus funciones, deberían ser ocupados por personal funcionario y no por personal laboral, como refleja el organigrama. Además, recuerda la obligatoriedad de pertenecer o al personal funcionario o al laboral fijo del Concello para estar en su organigrama, un requisito que no reúnen al menos 50 trabajadores.
Este medio centenar de empleados municipales aparece relacionado en el apartado de consolidación de empleo temporal, que el Concello pretende realizar dejando as prazas na situación actual ata a xubilación ou baixa voluntaria. El secretario se opone a esta opción y plantea iniciar un proceso de consolidación que valore la antigüedad de la relación laboral con el Concello.
Las otras dos alegaciones presentadas por el tesorero tienen un carácter más técnico, al igual que sucede con la del secretario de la Comisión de Facenda.
