Los vecinos acompañaron a la esposa del holandés que desapareció hace un año

Petín prendió velas en recuerdo de Verfondern

Una mesa con velas y la fotografía de Matin Verfondern, colocadas a la puerta del Consistorio de Petín, presidieron la concentración convocada con motivo del primer aniversario de su desaparición del pueblo de Santoalla. La organizó su esposa, Margo Pool, quien, visiblemente afectada, tuvo unas palabras de recuerdo para su marido, 'un hombre con cabeza dura, pero con un gran corazón', según dijo.
Durante su intervención, interrumpida por las lágrimas en varias ocasiones, la mujer mostró sus deseos de conocer qué le sucedió a su marido 'No saber dónde está es lo más difícil', dijo antes de exclamar: 'Martin, no sé dónde estás, pero tu espíritu está conmigo'.

La esposa de Verfondern reconoció que 'para mí, este acto es como un funeral', y es que Margo Pool dice que su marido fue asesinado. Confía en que un cazador descubra sus restos algún día y atribuye su muerte a la mala suerte: 'Fue por estar en el sitio equivocado, en el momento menos oportuno', dijo.

A la concentración acudieron unas 75 personas, entre ellas muchos amigos de la pareja de Santoalla. Muchos de ellos la acompañaron desde el primer momento, sumándose a las labores de búsqueda y las batidas organizadas por la Guardia Civil. También acudió el alcalde, Miguel Bautista. El regidor, que mostró su apoyo a la vecina de Santoalla, cree que será difícil encontrar a Verfondern. 'Pasó mucho tiempo', explicó.

El año transcurrido desde la desaparición no desanima a los investigadores de la Guardia Civil, para quienes tuvo palabras de agradecimiento Margo Pool, aunque las líneas de investigación abiertas aún no les llevaron a su marido.

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