No hay nada como estar sentado en la silla de una terraza, con el bañador puesto, un sombrero de paja, las gafas de sol y esa 'clarita' que a media tarde, de un día de intenso calor, sienta como 'agua de mayo'.
No hay nada como estar sentado en la silla de una terraza, con el bañador puesto, un sombrero de paja, las gafas de sol y esa 'clarita' que a media tarde, de un día de intenso calor, sienta como 'agua de mayo'. Esa sensación espumosa de saciar la sed que aparece después de una dura jornada playa es uno de los mejores momentos del día.
Sin embargo, no es la única bebida que sirve para calmar la sed. Si quieres acabar con ese malestar puedes probar con los siguientes cócteles:
La Piña Colada: esta combinación de ron, piña y coco te hará sentir que estás en el Caribe.
Una Caipirinha: Llegada desde Brasil y a ritmo de samba esta bebida se adapta a diferentes tipos de fruta. Puede realizarse con fresa, mango o melocotón. Una variedad de sabores que hace que la sed se reduzca considerablemente.
Un Margarita: es el cóctel más vendido en México. Lo inventó un empresario para sorprender a una bella mujer y se ha instalado en la alta sociedad mexicana. Ahora, el mundo saborea este brebaje de tequila, cointreau y jugo de lima.
Un Limoncello: una base de zumo de limón, mezclado con trozos de lima o con hielos picados. El sabor de esta bebida italiana hará que la sensación de sequedad desaparezca.
Un Rosé: este tipo de vino es un zumo suave, poco espumoso, por lo que acompañado de unas aceitunas o unas patatas sería una combinación perfecta.
Un Gin-tonic: Además de digestivo, la mezcla de la ginebra y la tónica tiene efectos relajantes y favorece la eliminación de toxinas gracias a sus propiedades diuréticas y depurativas.
Un Hurricane: es un sabroso cóctel de ron blanco y moreno con zumo de maracuyá, lima y granadina, todo acompañado de gran cantidad de hielo picado. Eso lo convierte en dulce y refrescante perfecto para soportar las altas temperaturas.
Un Long Island: el té helado es una de las bebidas del verano más olvidadas y la más fácil de realizar. Se puede hacer con diferentes licores blancos o de varios sabores. Esta mezcla se sirve con hielos y unas gotas de limón, perfecta para ver el atardecer sentado en una terraza cerca de la playa.
