El golfista español Jon Rahm ha protagonizado una de las mayores sorpresas del deporte en este casi terminado 2023, al aceptar el millonario contrato con la liga LIV, un proyecto surgido en el año 2022 en Arabia Saudí contra los tradicionales circuitos americano y europeo de este deporte. La LIV es un movimiento más –a través del mundo del deporte- del país petrolero en su estrategia de ganar influencia mundial sobre un tablero geopolítico cada vez más cambiante. En lucha contra países como Qatar o Emiratos.
Rahm, que es uno de los referentes mundiales de este deporte, se mantuvo fiel a la PGA en un primer momento. Sus argumentos eran el respeto a la tradición y a los valores clásicos por encima de los petrodólares y las normas innovadoras de la nueva competición. Y no varió su postura durante meses, pese a las invitaciones de famosos exgolfistas, partidarios del cambio. El español siempre deseó la paz y unidad entre ambos frentes.
En junio de 2023, los circuitos tradicionales y la LIV firmaron un acuerdo, que básicamente consiste en repartirse el pastel y crear un organismo unificado, patrocinado por el Fondo de Inversión Pública saudí (PIF). En resumen, Arabia Saudí ya controla el golf mundial. En este clima, Rahm sí aceptó un mareante contrato de la LIV por 500 millones de euros. Poderoso caballero es don dinero.
