La temporada pasada me sorprendía a mi mismo conectándome a internet y lamentando los triples fallados por Kelati y saltando con los mates de Lima. Mi mujer tardó en comprender el porqué de mi repentina pasión por el Murcia y sobre todo los motivos por los que las mañanas y mediodías de los domingos habían cambiado bruscamente su rutina.
Una más de las ourensanas que ya sabe que tenemos un vecino en la élite del baloncesto español. Que lleva muchos años al máximo nivel pero además ahora soltando amarras y ratificando a los más críticos que tiene tanto nivel como el que más y que esto solo está empezando.
Soy totalmente parcial cuando hablo de Diego Ocampo. Lo saben muchos y no lo escondo. Me alegro de todo lo bueno que le pase a la vez que lamento que en Ourense llegamos tarde. Tengo tan claro que su carrera está todavía en los primeros peldaños como que aquel verano del 2009 habría cambiado para siempre el futuro del COB.
Ni la más mínima duda de que con él también habríamos llegado a donde estamos. Ocampo es de todo menos la pizarra de lo domingos. Es trabajo constante y línea recta. Construye a medio y largo plazo, justo lo que aquí nunca ha habido.
Estoy seguro de que lo veremos este año en el Pazo. Y eso es bueno para todos. ¡La de veces que hemos hablado de esto! Ourense sufrirá en la ACB porque le falta estructura pero la merece y se la ha ganado. Tiene lo más importante, ilusión y respaldo social. Cuando entre será complicado que vuelva a salir.
Ourense se ha dado cuenta de lo importante que es la ACB para todos. El baloncesto cambiará la cara de la ciudad y nos meterá en una lista de privilegiados que nada tiene que ver con el apoyo público. Generará lo que necesita y desde el desembolso privado. Por eso es el momento.
Sabía que la ACB nos dejaría fuera y está escrito. Igual que ahora creo que las personas harán justicia y se impondrán a los intereses arbitrarios. Insisto en el mensaje. Creo en las personas y en mi ciudad. Es el camino por el que Ourense por fin se cruzará en el de Diego Ocampo. Aunque sea como rivales. Enhorabuena Diego.
