No es la primera vez que se repite la escena. Pero, una vez más, no pasa nada y queda tal cual. Nos referimos a que la bandera de España vuelve a retirarse de un acto, en donde se hallaba junto a la enseña de Cataluña. Dicho en otros términos, para entendernos:
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participó en una rueda de prensa y nada más concluir -se desarrolló en la sede de la Generalitat-, funcionarios del Gobierno catalán, nada más intervenir y aprovechando ese receso, procedieron a retirar la bandera de España, que se había situado tras el atril donde el presidente del Ejecutivo había realizado unas declaraciones, y antes de que interviniese el titular de la Generalitat, Pere Aragonès.
La enseña nacional fue escondida detrás de una puerta, dejando en el atril exclusivamente la bandera de Cataluña, dado que a continuación intervendría el presidente catalán. De esta forma, el fondo que se ha situado detrás de Sánchez y Aragonès durante sus oportunas comparecencias públicas, fue diferente, evitando así que el presidente de la Generalitat interviniera ante los periodistas con la bandera española, sí la de Cataluña.
Por cierto, recordemos que ese encuentro se produjo una vez que Pedro Sanchez y Pere Aragonés (qué apellido tan curioso para el presidente catalán) se reunieron durante hora y cuarto en el Palau de la Generalitat, en donde han acordaron varios asuntos, como la convocatoria de la reunión de la Mesa del Diálogo o la ley de garantía de plurilingüismo en las administraciones públicas.
Ya estamos acostumbrados a que los integrantes del Gobierno catalán intervengan exclusivamente mostrando la enseña de esa comunidad. A pesar de que reiteradamente se exige y se reclama que la bandera de España tiene que exhibirse obligatoriamente y no hacer actos oficiales en donde solamente aparezca una única enseña, como hacen cada vez que en cualquier acto solamente se muestra la “senyera”. Su uso -cuatro barras rojas en fondo amarillo- debe estar presente en los edificios públicos y en los actos oficiales que tengan lugar en Cataluña.
Así pues, nos llama la atención que el propio Gobierno no obligue a que las dos banderas aparezcan en el territorio de esta Comunidad Autónoma y que nadie haga nada para cambiarlo, y eso que se reiteran las demandas por parte de instituciones de Justicia e incluso la Asociación Impulso Ciudadano, que ha exigido al presidente de la Generalitat, tal y como ordena la normativa vigente, la colocación de la enseña española en el Palau y que interpondrá un recurso contencioso-administrativo si se hace caso omiso.
