Opinión

El inefable

El inefable don José María Aznar, en la entrevista que le hizo Jordi Évole el otro día, se reveló una vez más como lo que ya sabíamos que era. Una persona engreída, presuntuosa, incapaz de la mínima autocrítica. Todas las respuestas que dio a las preguntas de Évole fueron autoalabanzas.

Yo creo que Aznar es un mentiroso, pero no tengo la certeza de que lo sea. Supongamos que no lo es, salvo las inevitables mentiras que le tocaría decir por su cargo como presidente del Gobierno. Pero sí estoy seguro de que Aznar es lo que dije antes: engreído, presuntuoso, incapaz de autocrítica. Siempre me pareció que él se cree más inteligente de lo que es, y por eso piensa que nunca se equivoca.

Hubo dos cosas que me llamaron la atención en la entrevista. Bueno, exactamente no me llamaron la atención porque ya me las sabía. 

Una su lenguaje. Repitió la palabra "perdone", retórica en su caso porque no le estaba pidiendo perdón a Évole por nada, unas cincuenta veces; la frase "si usted me pregunta eso yo le digo que", para a continuación no responder a la pregunta otras tantas veces, o "eso para mí es inaceptable" lo mismo; y todo así. 

Genialmente cuando Évole le preguntó si se había endiosado, lo negó pero precisó que desde 2004 no ha habido ni un solo día en que alguien no lo haya llamado para que vuelva. 

Al igual que negó tajantemente tener conocimiento de los sobresueldos y chanchullos que pasaban por delante de su despacho de Génova.

Señalo precisamente lo de su lenguaje porque si revisan ustedes la entrevista verán que ese lenguaje es muy limitado. Como el de esas personas que cada diez palabras colocan una repetitiva coletilla como "dicho esto" o "y le aseguro que". Unas formas de rellenar el discurso sin decir nada. Escasez de lenguaje se llama eso.

Lo otro que me llamó la atención fue esta frase: "Es inadmisible considerar al PP como una organización delictiva". Por supuesto. No creo que nadie en España piense eso. Yo tampoco. Tengo familiares y amigos que votan al PP o son del PP y son personas honradas. Y seguramente muchos de ustedes también los tienen o lo son. Pero la lista de altos cargos imputados, condenados y encarcelados por corrupción durante su mandato se sale del mapa. Nadie considera que el PP fuera una organización delictiva, pero habiendo sido presidente esos años, su observación solo es un escaqueo al tema y no aporta nada.

Pero la bomba llegó al final. Évole le pidió una frase que describiera su etapa como presidente y su respuesta fue: "Aznar estuvo bien".

¡Coño! y perdonen la expresión. Este hombre habla de sí mismo en tercera persona. Solo le faltó hablar en plural mayestático. Aunque a mí me pareció que lo hacía todo el tiempo. Yo me pasé el programa temiendo que a Jordi Évole le fuera a dar una cataplexia de las suyas. Hubiera sido lógico.

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