Opinión

Luis Estévez y Philipe Gabriel, propuestas plásticas desde la piel

La piel, el mayor órgano de nuestro cuerpo, está en el principio o base de las dos exposiciones que se pueden contemplar estos días en Ourense. Órgano de los sentidos, del tacto, palidecemos y nos sonrojamos, emanamos olor, con su melanina y pH, a flor de piel, con tacto. Viajes sensoriales, metáfora de materialidad, y mensajes. Para Estévez su exposición es leña, mas “Leña espida”, desnuda, con tallas en las que la madera es la piel de las figuras femeninas. Es “Pele”, sin más, en el caso de Gabriel, título que no dice nada y lo dice todo.

Luis Estévez Estévez, que vive en Piñor, inmediaciones de Ourense, donde hace de la talla, preferentemente femenina y en madera, santo y seña temático. Es natural de Entrimo (Pereiras, n. 1952), tierra de frontera, como su arte. Trabajó como técnico vinícola, un experto, desde su licenciatura en Biología, canalizando sus inquietudes artísticas plásticas en esporádicas exposiciones, casi siempre en compañía de algún artista. Figuras y bustos, piezas fusiformes de afilados rostros, en castaño y nogal son su seña de identidad, piezas en las que  suele omitir los brazos. A ellas añade, a veces, pintura a modo de ropa, cordones, y estopa pelo o cabello, mas lo característico suyo es tallar desde el tronco que desbasta, dejando parte de como base. Son así unas piezas estrechas, pulidas, de afilados rostros y gesticulación escasa. Con esta dependencia del marco, debe adaptarse asimismo al esquema geométrico, lo que le conduce, necesariamente, a las obras de las culturas en las que hicieron virtud de esta necesidad, caso de las del África negra y otros primitivos actuales, conocidas desde las fotografías de estudios monográficos, de grandes ojos, incluso de los Íberos. Trae asimismo a esta misma Galería Visol, de la que es un usual, en la que ha expuesto en 2018 y 2020, relieves.

Philipe Gabriel es asimismo biólogo de formación. Natural de Brasil (n. 1992, Tijucas), llega a Portugal donde vive desde 2021 y se forma en el medio creativo de la fotografía en el Instituto de Produção Cultural e Imagem de Lisboa. Aquí expuso en la Galería Imago Lisboa, el verano pasado, con el ourensano Vítor Nieves (n. 1980, A Gudiña) como curador, quien se halla muy vinculado a Portugal, donde trabaja usualmente, y también coordina en el proyecto que se exhibe en el Espacio de Arte RV. Así en ambas está presente la huella del OF, Outono Fotográfico, plan transversal de hondo recorrido que desde Ourense y principalmente de la mano de Xosé Lois Vázquez, desde sus inicios, trajo a Ourense las principales figuras gallegas y españolas durante lustros cada otoño y en el que se fue implicando el propio Vítor en los últimos años. ¿Cómo no ver aquí y ahora un continuum? Hay un Álbum de familia, y algo más, desde su relación hijo-madre, que habla de psicoanálisis y relaciones humanas, así los hilos de lana rojos, tan efectivos, con la literatura como fondo, a partir del material adquirido en la Feira da Ladra, el Rastro lisboeta. Aquí ha traído con anterioridad Nieves, la de Virginia Rota, premio Galicia de fotografía contemporánea, 2020. Gabriel ha hecho libros de fotografía y de artista. Es la suya una exposición-instalación, efectiva y afectiva.

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