Opinión

Agua para un trasatlántico

Excepto el bañista que abandona la playa rebozado en arena, el personal está concienciado de que con el agua “hasta la última gota cuenta”, como rezaba aquella atinada campaña de sensibilización. Un veterano fotoperiodista confesó a mediados de agosto que se tenía que contener cuando veía a alguien abusando de las duchas que distinguen a los arenales con bandera azul. Le comentó su observación al alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, y ‘Gelo’, según se presenta el regidor de este municipio coruñés con una de las rentas más altas del Estado y amigo íntimo de Fidel Castro, decidió cerrar el grifo de las duchas y dejar el de los pies, pero el ojo del fotoperiodista captó que el derroche era similar porque la peña malgasta a barreños.

Un veterano fotoperiodista confesó a mediados de agosto que se tenía que contener cuando veía a alguien abusando de las duchas que distinguen a los arenales con bandera azul.

En el país de la lluvia ha dejado de sorprender que la escasez de agua se note en época estival en zonas masificadas por el turismo como Baiona o Vigo, pero a mediados de septiembre el área de A Coruña se mantiene en prealerta al encontrarse el embalse de Cecebre al 45% de su capacidad a pesar de que el registro de lluvias en agosto se situó dentro de los parámetros de normalidad para la época. Un miembro de la asociación ecologista Arco Iris comentó hace unos días que el consumo doméstico es mínimo respecto a la agricultura, la industria que necesita agua para desarrollar su actividad y las pérdidas en la red de saneamiento, tan necesarias como irrelevantes en cuanto a la seducción electoral del ciudadano.

La calidad del agua también es un elemento de revalorización de un territorio. Lo saben, por sabor, tanto la multinacional norteamericana de refrescos con planta en A Coruña desde 1960, como la cervecera Estrella Galicia, bandera de la ciudad y de la tierra desde 1906. El agua de Cecebre es la caña.

La calidad del agua también es un elemento de revalorización de un territorio.

Según Arco Iris, la refinería es otro gran consumidor en el área coruñesa, pero la industria genera empleo y bienestar. Los ecologistas sitúan el foco en la constante llegada de trasatlánticos a los muelles coruñeses cargados de turistas que garbean unas horas por la ciudad sin que el comercio y la hostelería lo noten en la caja. Para la Autoridad Portuaria puede ser parte del negocio por el amarre, pero abastecer el mastodóntico turismo de cruceros aumenta la vía de agua en Cecebre. 

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