Semana de pasión la que viene ahora. Tras un Domingo de Ramos con gradas llenas y partidos clave, empieza ahora una Semana Santa en la que el fútbol ourensano no descansa e incluso puede celebrar el ascenso más esperado.
Hubo ambientazo, especialmente en el partido disputado en Santiago entre el Compostela y el Arenteiro. La grada verde de San Lázaro se llevó la palma. Los aficionados del Arenteiro celebraron por todo lo alto una victoria que sabe a ascenso y que sirve como ensayo para la fiesta que se vivirá el próximo fin de semana en Espiñedo. La temporada es tan espectacular que igual los festejos son en el campo el sábado y matemáticamente en la calle el domingo.
Será el que encienda la traca de lo que está por venir. Porque falta lo mejor. Con el buen tiempo y las clasificaciones ajustadas llegan los partidos descisivos. Goles como el del Ourense CF que acerca una permanencia o como el de la UD Ourense en A Coruña que deja más cerca el billete para la promoción.
Derbis imprevisibles, como que retransmistió en directo la web de La Región y que dio aire al Antela ante un Verín un poco más hundido. Derrotas inesperadas, como la del Barbadás en Os Carrís. Victorias imprescindibles, como la del Atlético Arnoia.
Y todo eso sin tocar el fútbol local. Una Primera Galicia que tiene mucho que jugar por arriba y todo por decidir por abajo. Allí estará la temporada que viene el ya ascendido Ribadavia Atlético. Dos tazas de pasión esta semana con el santo fútbol.
FOTOS: JOSÉ PAZ, ÓSCAR PINAL Y MIGUEL ÁNGEL
