Maestro-entrenador de judo y defensa personal

Manuel Montero: ‘Comencé a practicar esto del judo comprando cursos a distancia de CCC’

Manuel Montero (Foto: Xesús Fariñas )
Hablar de judo en Ourense es hablar de Manuel Montero. Es el profesor más longevo de Galicia y por sus manos han pasado cientos de judokas. ‘Ahora ya vienen los hijos y hasta los hijos de los hijos de alumnos que he tenido’, asegura Montero. Entiende el judo como forma de educar ante la vida y una disciplina de la que disfrutar siempre que se asimilen de arri ba a abajo las normas como punto de partida. Descubrió el judó a los 15 años, cuando en Ourense era algo desconocido, y desde entonces no ha dejado de aprender y de evolucionar en su profesión y hobby.
Las proezas de Antón Geesink fueron el origen de su interés por el judo. El gigante holandés fue el primer occidental que derrotó a un japonés en un torneo oficial, y acabó de mitificarse ganando el oro olímpico en 1964 en Tokyo, en territorio enemigo.

¿Cómo empezó todo?


Todo aquello de Geesink, aquel judo era como algo mágico. Aquí en Ourense no había judo y comencé a practicarlo comprando cursos por correspondencia de esos de CCC.

Pero no tardó mucho en engancharse...


En los años 60, Llamas y Franjo empezaron con el judo en el Pabellón y pronto tuvieron muchísimos practicantes. En 1970, fundamos el primer club, el Banzai. De ahí se originó el Judo Club Orense.

Lejos de conformarse con evolucionar y aprender llegó incluso a innovar.


¿Cómo esa historia? El que hace judo es judoka para siempre, pero es un deporte que no entiende el que no lo ha practicado y que no es fácil para el espectador. Pensamos que había que cambiar algunas cosas y creamos la NBA del judo.

Explíquese bien.


Creamos la primera Liga de judo profesional de España. Gente de todo el país venía a competir a Galicia. Hicimos algunos cambios. Empezamos a utilizar kimonos de color cuando sólo se utilizaban blancos, los combates eran a tres minutos en vez de a cinco para hacerlos más dinámicos y redujimos las valoraciones de cuatro a dos, sólo había ippon y yuko. Eran novedades que ahora se utilizan y que nosotros introdujimos ya en los 80.

No vaya tan lejos. Hábleme de los años 70 en Vitoria y de un futbolista que conoció allí.

Puskas entrenaba al Alavés e íbamos al mismo gimnasio. Era muy simpático y anticomunista hasta la médula.

Pero una noche...


Me invitaron a cenar él y otro húngaro, Laszlo Weber. Con ellos probé el goulash por primera vez en mi vida. Había caído una nevada enorme y hacía un frío tremendo, pero salí de aquella casa echando fuego por los ojos. ¡Cómo picaba aquello! No lo comí nunca más en mi vida.

Buen punto de arranque para hablar del Real Madrid.


Tengo mis dudas de que vayamos a levantarnos con Florentino. Saltó del barco como una rata cuando se hundía y ahora viene como Moisés a mostrarnos la tierra prometida. Todo el mundo comete errores. Esperemos que esta vez acierte y no se quede todo en el talonario. Está claro que se ha vuelto a hablar del Real Madrid, el club vuelve a estar en el centro del mundo, pero otra cosa luego serán los resultados deportivos.

Pero es más fácil que repunte el Madrid que la crisis mundial, ¿no?


El mundo ha estado dirigido por vendedores de humo. Ahora mismo veo difícil salir, ésta está siendo una crisis extremadamente dura, pero estoy convencido que lo haremos porque la humanidad siempre sale adelante a pesar de los políticos.

Bueno, pues hasta que consiga el siguiente


Dan Llevo seis, pero eso sólo quiere decir que soy muy viejo.

Te puede interesar