Fichó por Club Deportivo Ourense en el mes de enero para tratar de poner el buen rumbo en un equipo que de inicio estaba obligado a luchar por todo pero que se había salido de su ruta. Sus números le fueron dando la razón. Diez victorias, siete empates y una derrota en Liga y el Ourense en la promoción, pero el equipo fue a fallar en el momento más inoportuno. Derrota por 2-0 en Inca ante el Constancia y adiós al ascenso.
La Tercera división no tiene secretos. Colgó las botas a los 27 'por cansancio, me gustaba más entrenar', a pesar de que había logrado un ascenso desde Preferente con el Alondras, había jugado dos años en Tercera con el Gondomar, y aquel Ponte que aspiraba a todo en los 90 lo había querido fichar. Licenciado en INEF, fue preparador físico del Celta B, y al abandonar la disciplina celeste comenzó su andadura por los banquillos de Tercera. Nueve temporadas, con un año sabático en medio para operarse de una hernia discal pero bien aprovechado para obtener el título de entrenador nacional. Su oportunidad le llegó en el Lugo, en Segunda B. Dos temporadas, y desde hace unos meses, el Ourense, en Tercera. No ha sido un paso atrás, sólo un nuevo puerto.
A pesar de no obtener el objetivo, el presidente Juan Pérez le muestra su confianza y el técnico nacido en Nigrán hace 43 años tendrá una segunda oportunidad, en esta ocasión con un proyecto mucho más personal.
'¿Qué cosas quiero cambiar? Mi método de trabajo se basa en cuatro aspectos fundamentales: en los refuerzos busco un perfil de jugadores diferente, por otro lado intentaré mentalizar a todos los estamentos (jugadores, club, afición y medios de comunicación) que el objetivo primordial es pelear por el primer puesto como requisito para tener más posibilidades de ascenso, tercero, las infraestructuras del club, pues debemos tener disponibles buenos campos de entrenamiento, y desgraciadamente el Ourense no los tiene. Santa Cruz es un buen campo, en alguna ocasión podríamos utilizar el de Salesianos, y parece que en poco tiempo podría estar disponible uno en la Universidad. Por último, pido que me dejen trabajar dándome la mayor responsabilidad posible, me gusta llevar el control del vestuario. Creo que el jugador que esté en el Ourense lo haga con un grado de compromiso al cien por cien, no puede haber excusas para no entrenar', señala Fonsi.
'¿Fichajes? En los tres o cuatro próximos días tiene que haber novedades. Por lo demás, hay 15 jugadores y falta saber la respuesta de Barreal y Quintairos, y nos marcamos como tope estos días. ¿Lista? Estamos trabajando con una docena de nombres (Capelo y Torres, del Negreira, y Hugo, del Céltiga, están en ella)'.
'¿El filial y la base? Creo que antes de estar yo había jugadores sub 23 que sin ser convocados con el primer equipo no jugaban con el filial. Después hubo una regularidad y en ese sentido creo que hay una buena sintonía. Llevar la base no es compatible con el cargo de primer entrenador, en ese sentido sería necesario un director deportivo, una figura que actualmente no existe', añade.
Fonsi Valverde reconoce que 'sigo con envidia la promoción de los gallegos porque sé que podíamos estar ahí, ganamos muchas batallas pero no la guerra. Siendo egoísta es mejor que no ascienda ni Coruxo ni Cerceda, con ellos en Segunda B sería más difícil poder hacer fichajes'. El técnico ya mira a la pretemporada, que pondrá en marcha el día 21 de julio.
A pesar de no obtener el objetivo, el presidente Juan Pérez le muestra su confianza y el técnico nacido en Nigrán hace 43 años tendrá una segunda oportunidad, en esta ocasión con un proyecto mucho más personal.
'¿Qué cosas quiero cambiar? Mi método de trabajo se basa en cuatro aspectos fundamentales: en los refuerzos busco un perfil de jugadores diferente, por otro lado intentaré mentalizar a todos los estamentos (jugadores, club, afición y medios de comunicación) que el objetivo primordial es pelear por el primer puesto como requisito para tener más posibilidades de ascenso, tercero, las infraestructuras del club, pues debemos tener disponibles buenos campos de entrenamiento, y desgraciadamente el Ourense no los tiene. Santa Cruz es un buen campo, en alguna ocasión podríamos utilizar el de Salesianos, y parece que en poco tiempo podría estar disponible uno en la Universidad. Por último, pido que me dejen trabajar dándome la mayor responsabilidad posible, me gusta llevar el control del vestuario. Creo que el jugador que esté en el Ourense lo haga con un grado de compromiso al cien por cien, no puede haber excusas para no entrenar', señala Fonsi.
'¿Fichajes? En los tres o cuatro próximos días tiene que haber novedades. Por lo demás, hay 15 jugadores y falta saber la respuesta de Barreal y Quintairos, y nos marcamos como tope estos días. ¿Lista? Estamos trabajando con una docena de nombres (Capelo y Torres, del Negreira, y Hugo, del Céltiga, están en ella)'.
'¿El filial y la base? Creo que antes de estar yo había jugadores sub 23 que sin ser convocados con el primer equipo no jugaban con el filial. Después hubo una regularidad y en ese sentido creo que hay una buena sintonía. Llevar la base no es compatible con el cargo de primer entrenador, en ese sentido sería necesario un director deportivo, una figura que actualmente no existe', añade.
Fonsi Valverde reconoce que 'sigo con envidia la promoción de los gallegos porque sé que podíamos estar ahí, ganamos muchas batallas pero no la guerra. Siendo egoísta es mejor que no ascienda ni Coruxo ni Cerceda, con ellos en Segunda B sería más difícil poder hacer fichajes'. El técnico ya mira a la pretemporada, que pondrá en marcha el día 21 de julio.
