Contador, que entró con el resto del pelotón a más de nueve minutos de los cuatro escapados, es el décimo español en enfundarse el maillot de líder y será el próximo ganador del Tour de Francia si nada lo impide. El corredor de 24 años está a punto de hacer historia. Ahora deberá mantener el tipo mañana, en una etapa a priori fácil, y superar la crono del sábado.
BENNATI, MÁS VELOZ QUE EL RESTO
Por lo demás, Bennati, que fue el vencedor de etapa, apuntó así la primera victoria en este Tour para su equipo, en una día en el que cuatro corredores, que formaban un grupo de ocho desde el kilómetro cinco, llegaron juntos a meta. El suizo Martin Elmiger (AG2R), el alemán Jeans Voigt (CSC), y su compatriota Markus Fothen (Gerolsteiner), que entró justo después del vencedor de la etapa.
La única dificultad en el día de hoy, fue un puerto de tercera categoría a la altura del kilómetro 23 y uno de cuarta, a 19 de meta, que supuso el último esfuerzo de un pelotón, que va quedándose pequeño después de que hoy no tomara la salida el Cofidis, de Cristian Moreni, éste último expulsado por dopaje tras la etapa de ayer.
La escapada que comenzó en los primeros kilómetros contó con otros cuatro corredores que no aguantaron el ritmo de los cuatro primeros que se distanciaron a falta de 10 kilómetros para la llegada. Así, Millar (Saunier Duval-Prodir), Tossato (Quick Step-Innergetic), Quinziato (Liquigas) y Righi (Lampre-Fondital), con más de dos minutos de desventaja respecto a Bennati.
Mañana el Tour llegará a Angouleme, en una etapa larga con un recorrido de 211 kilómetros, y donde la llegada al sprint será algo más que probable si no se lanza ningún valiente que pretenda asustar a Contador, que ya ve cerca, y desde lo más alto, los Campos Elíseos.