Los presidentes del PNV, Iñigo Urkullu, y del Partido Popular vasco, Antonio Basagoiti, centraron su reunión de ayer en tratar de acercar posturas respecto a la aplicación en Euskadi de las medidas de ajuste del gasto público propuestas tanto por el Gobierno como por el Gobierno Vasco. La reunión fue en la sede central del PP en Bilbao, siendo la primera vez que Urkullu acudió a ese lugar. A su término, ambos comparecieron por separado ante los medios, si bien coincidieron en calificar el encuentro de 'cordial' y de enmarcarlo dentro de la 'normalidad' en las relaciones de los dos partidos.
Urkullu pidió las reuniones de la Comisión Mixta del Concierto Económico y del Órgano de Coordinación Tributaria para estudiar la aplicación en Euskadi de las medidas de ajuste acordadas por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y en concreto, discrepó ante la posibilidad de aumentar los impuestos a las rentas más altas, planteamiento que consideró como 'simplista y hasta demagógico'. Pidió 'rigor' al estudiar esa propuesta y recordó que en Euskadi la última reforma del IRPF se hizo hace siete meses, que 'aquí las rentas más altas cotizan de manera diferente a las del resto del Estado' y que ese aumento de la presión fiscal no acarrearía ingresos a las arcas públicas a corto plazo.
