La presidenta electa de Castilla-La Mancha, Maria Dolores de Cospedal, aprovechó su discurso de investidura para anunciar un importante recorte del gasto en la comunidad autónoma. Para mostrar su determinación, se refirió a una reducción 'tajante' del gasto corriente y a una 'contundente' racionalización del sector público.
Entre las medidas a las que serefirió, destaca la reducción de los altos cargos. Cospedal prometió que reducirá las Direcciones Generales de 52 a 30, dejará un delegado de la Junta por provincia, pasando así de los 35 actuales a 5, y suprimirá el 50 por ciento de los puestos de libre designación, lo que supondrá reducir el número de altos cargos del Ejecutivo en un 60 por ciento.
Cospedal dejó claro ante los nuevos diputados regionales que cree en el Estado Autonómico, pero ha precisado que 'una cosa es el compromiso con nuestro Estado de las Autonomías y que otra bien distinta es considerar que la filosofía de gasto ha de ser consecuencia inevitable de nuestra organización territorial'.
Por lo tanto, 'descentralizar', algo que ha defendido que es necesario llevar a cabo, no significa 'multiplicar por 17' toda la estructura del Estado, y ha rechazado los excesos derivados de contar con un Estado autonómico. Para dar muestra de esta necesidad de recortar lo superfluo en las autonomías, Cospedal recordó que suprimirá la figura en Castilla-La Mancha del Defensor del Pueblo, la Comisión Regional de la Competencia, el Consejo Económico y Social y analizará la viabilidad de la Sindicatura de Cuentas para comprobar si es necesario mantener esta entidad, en relación con el servicio que presta, el interés general y el coste que supone.
Cospedal dejó claro ante los nuevos diputados regionales que cree en el Estado Autonómico, pero ha precisado que 'una cosa es el compromiso con nuestro Estado de las Autonomías y que otra bien distinta es considerar que la filosofía de gasto ha de ser consecuencia inevitable de nuestra organización territorial'.
Por lo tanto, 'descentralizar', algo que ha defendido que es necesario llevar a cabo, no significa 'multiplicar por 17' toda la estructura del Estado, y ha rechazado los excesos derivados de contar con un Estado autonómico. Para dar muestra de esta necesidad de recortar lo superfluo en las autonomías, Cospedal recordó que suprimirá la figura en Castilla-La Mancha del Defensor del Pueblo, la Comisión Regional de la Competencia, el Consejo Económico y Social y analizará la viabilidad de la Sindicatura de Cuentas para comprobar si es necesario mantener esta entidad, en relación con el servicio que presta, el interés general y el coste que supone.
