El comisario europeo exige responsabilidades por estas 'tropelías impropias de una democracia'

La red de espionaje investigó a Almunia, Puig y Díaz-Ferrán

El vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, que pudo ser víctima de la trama de espionaje político y empresarial destapada en Cataluña, exigió ayer responsabilidades hasta el final y que lo paguen quienes cometieron estas 'tropelías impropias de una democracia'.
Almunia se refirió así a las informaciones de dos diarios catalanes que apuntaron a que él fue uno de los espiados en esta trama, cuyo epicentro parecía estar en la agencia de detectives Método-3.

Dichos diarios desvelaron que la agencia hizo informes sobre políticos como José Montilla, Felip Puig, Joana Ortega, Josep Lluis Carod-Rovira y sobre empresarios como el expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz-Ferran. Entre las personas investigadas también figuran el presidente de Madrid, Ignacio González, el exconseller Joaquim Llena, el expresidente de la Junta de Castilla-La Mancha, José María Barreda, el alcalde de Lleida, Angel Ros, el diputado Xavier Sabaté o la expresidenta de Baleares, Maria Antonia Munar. Además de Tita Cervera o el exmarido por poderes de Gina Llollobrígida, el catalán Javier Rigau.

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