La sede del PP en Nigrán (Pontevedra) sufrió esta madrugada un ataque con un artefacto incendiario, sin que se registraran heridos, aunque sí daños materiales, según confirmaron fuentes del partido.
El responsable del PP en esta localidad, Alberto Valverde, explicó en declaraciones a Europa Press que un trabajador de una empresa de seguridad privada que vigilaba negocios y viviendas en las zona le llamó sobre las 4.30 horas de esta madrugada para advertirle de que se estaba produciendo un pequeño incendio en la sede del partido, en el número 6 de la calle Rosalía de Castro.
Según explicó Valverde, 'alguien rompió la vidriera del local e introdujo en el interior un artefacto o cóctel molotov', lo que provocó un incendio. El fuego afectó a varias sillas y una mesa que había en la sede, aunque no se propagó hacia la oficina interior.
'Por suerte, tampoco hubo daños en las viviendas superiores -la sede está en el bajo de un edificio--', apuntó Valverde, quien mostró su sorpresa por el ataque y evitó relacionarlo con la actividad política del grupo. Asimismo, confirmó que el PP de Nigrán no había recibido ninguna llamada o aviso amenazante, ni tampoco noticia de nadie que reclamase la autoría del ataque.
Al lugar se desplazó una dotación de la Guardia Civil, que investiga lo ocurrido. Uno de los primeros pasos de los agentes fue comprobar que el ataque no se hubiera repetido en otras sedes del Val Miñor pero, según apuntó Alberto Valverde, 'no hay noticias' de que hubiera otros incidentes.
Según explicó Valverde, 'alguien rompió la vidriera del local e introdujo en el interior un artefacto o cóctel molotov', lo que provocó un incendio. El fuego afectó a varias sillas y una mesa que había en la sede, aunque no se propagó hacia la oficina interior.
'Por suerte, tampoco hubo daños en las viviendas superiores -la sede está en el bajo de un edificio--', apuntó Valverde, quien mostró su sorpresa por el ataque y evitó relacionarlo con la actividad política del grupo. Asimismo, confirmó que el PP de Nigrán no había recibido ninguna llamada o aviso amenazante, ni tampoco noticia de nadie que reclamase la autoría del ataque.
Al lugar se desplazó una dotación de la Guardia Civil, que investiga lo ocurrido. Uno de los primeros pasos de los agentes fue comprobar que el ataque no se hubiera repetido en otras sedes del Val Miñor pero, según apuntó Alberto Valverde, 'no hay noticias' de que hubiera otros incidentes.
