La concejala nacionalista de Lugo Paz Abraira afirmó que el grupo municipal del BNG 'no va a restaurar ningún pacto' de gobierno con el PSdeG, después de que el bipartito se rompiese por la negativa del alcalde, el socialista José López Orozco, a presentar su dimisión tras ser imputado en la Operación Pokemon.
En declaraciones a los medios de comunicación, Paz Abraira recordó que 'la situación procesal del alcalde no ha cambiado. Más bien todo lo contrario. Después de una declaración de seis horas se mantiene imputado por los mismos cargos'.
En todo caso, la edil nacionalista también quiso aclarar que la decisión que adoptó el BNG no se debe exclusivamente a la 'situación que se generó después de esta imputación del alcalde', dado que, al menos desde su punto de vista, hay 'responsabilidades políticas' que se derivan de 'la actuación de quien fue su mano derecha durante muchos años'.
Se refería Paz Abraira al que fuera concejal de Economía y Urbanismo de Lugo, Francisco Fernández Liñares, uno de los tres imputados en la Operación Pokemon a los que la jueza instructora envió a prisión, dado que, según la concejala del BNG, 'reconoció un sinnúmero de actuaciones ilícitas que, evidentemente, tienen un efecto sobre los ciudadanos'.
En ese sentido, reiteró que la 'asamblea local tomó una decisión' y, por lo tanto, el 'BNG es oposición y actúa como oposición'.
Según Abraira, los nacionalistas estudiarán 'todas aquellas alternativas y propuestas que el gobierno local tenga a bien presentar a los restantes grupos políticos', pero actuará 'en consecuencia en cada momento'.
'No nos vamos a sentar a negociar absolutamente nada con el PSdeG-PSOE. No tenemos nada que negociar', añadió, dado que los socialistas 'tienen un gobierno en minoría porque quisieron tenerlo. Porque el alcalde se negó a dimitir'.
En todo caso, la edil nacionalista también quiso aclarar que la decisión que adoptó el BNG no se debe exclusivamente a la 'situación que se generó después de esta imputación del alcalde', dado que, al menos desde su punto de vista, hay 'responsabilidades políticas' que se derivan de 'la actuación de quien fue su mano derecha durante muchos años'.
Se refería Paz Abraira al que fuera concejal de Economía y Urbanismo de Lugo, Francisco Fernández Liñares, uno de los tres imputados en la Operación Pokemon a los que la jueza instructora envió a prisión, dado que, según la concejala del BNG, 'reconoció un sinnúmero de actuaciones ilícitas que, evidentemente, tienen un efecto sobre los ciudadanos'.
En ese sentido, reiteró que la 'asamblea local tomó una decisión' y, por lo tanto, el 'BNG es oposición y actúa como oposición'.
Según Abraira, los nacionalistas estudiarán 'todas aquellas alternativas y propuestas que el gobierno local tenga a bien presentar a los restantes grupos políticos', pero actuará 'en consecuencia en cada momento'.
'No nos vamos a sentar a negociar absolutamente nada con el PSdeG-PSOE. No tenemos nada que negociar', añadió, dado que los socialistas 'tienen un gobierno en minoría porque quisieron tenerlo. Porque el alcalde se negó a dimitir'.
