A juicio de Ignacio Cuartero, comandante de la operación, el despliegue permitirá "demostrar la capacidad que tiene la Armada" para "sostener" un operativo "prolongado al otro lado del mundo" como el que ahora afrontan
Finalizado el período vacacional navideño, las unidades de la Armada con base en el Arsenal Militar de Ferrol reinician su actividad cotidiana; en el caso de la fragata "Cristóbal Colón", ha zarpado hoy rumbo a Australia para retomar la colaboración con su Marina.
El buque ha abandonado la ciudad poco después de las once de la mañana para afrontar el que será su viaje más largo, según ha destacado antes de la salida su comandante, Ignacio Cuartero.
"Es un reto para la dotación, para el barco y para la Armada", ha dicho el mando a los medios sobre la misión, asegurando que su "cometido es fortalecer una relación con un país estratégico, aliado y amigo".
A su juicio, el despliegue permitirá "demostrar la capacidad que tiene la Armada" para "sostener" un operativo "prolongado al otro lado del mundo" como el que ahora afrontan.
Cuartero ha declarado que la fragata que dirige "es la punta tecnológica de la Defensa en España; su dotación es una muestra de lo mejor de nuestra sociedad".
Ha abogado por "estar a la altura" y "cumplir con los cometidos" fijados en el marco de un plan que contempla la incorporación de 40 efectivos australianos.
"Se adiestrarán con nosotros en los cometidos que después van a realizar a bordo de sus buques", ha observado el comandante del barco, que ha añadido que se desarrollarán ejercicios en los entornos de Perth y Sídney.
Aunque la fragata "ya ha estado en el Índico", este será "el viaje más largo en su corta vida", ha desvelado; eso sí, "muy similar al que ya hizo en el 2013".
A bordo, 185 personas, el número establecido por la Marina española para poder sumar a los efectivos australianos.
Alfonso Pérez de Nanclares, comandante del Grupo de Acción Naval Número 1, ha estimado que esta misión "lleva bastante tiempo gestándose" y que su objetivo será "parecido a lo que se hizo con el Cantabria".
Así, ha remarcado que posibilitará "cubrir un vacío que tenía de buques de aprovisionamiento de combate" la Armada de Australia, que ha "decidido construir unos destructores basados precisamente en este barco; nos solicitaron si podíamos hacer un despliegue allí".
Con el mismo, los militares españoles buscan "ayudarles en el adiestramiento de su personal, apoyarnos mutuamente y mejorar nuestro adiestramiento mutuo".
Estarán cuatro meses en Australia, aunque la misión alcanzará un total de siete y supondrá "participar en ejercicios con dotaciones australianas a bordo" para que puedan "aprender cómo operamos nosotros".
Pérez de Nanclares no ha descuidado "que un país tan lejano sea viejo conocido; la relación entre las dos Marinas es excelente, el despliegue del Cantabria fue bien". A su entender, el que ahora arranca "tiene todos los visos de ser un éxito, como el otro", concretando que también servirá "para apoyar la industria nacional", aludiendo al naval.
De este modo, el comandante ha subrayado que el "tránsito que va a hacer el barco" contempla escalas en puertos elegidos "para apoyo logístico del barco y apoyo a la industria nacional en los países que necesita tener presencia".
Se prevén paradas en Arabia Saudí, India y Singapur antes de llegar a Australia. Por último, al regreso habrá otras en Perú y Cartagena de Indias para que "vean nuestros barcos".
