Ni hombres feministas, ni enemigos del macho ibérico

Seis gallegos se han propuesto revisar los estereotipos masculinos y promover la igualdad entre géneros. Con la fundación del colectivo ’Homes pola Igualdade’ intentan cambiar algunas mentalidades. Defienden la corresponsabilidad, el reparto igualitario de las tareas domésticas y la lucha activa contra la violencia de género.

Cuando las mujeres no tenían ni acceso a la pluma, los filósofos ilustrados más atrevidos fueron los primeros en manifestar por escrito las reivindicaciones de igualdad. Poullan de la Barre y Condorcet cuestionaron, en el siglo XVII, la inferioridad de las mujeres y defendieron la igualdad entre sexos.

A la Galicia de la Ilustración también llegaron estos discursos gracias, fundamentalmente, a tres figuras: Benito Feijóo, Martín Sarmiento y Vicente do Seixo. Feijoo realizó una activa defensa de la igualdad entre hombres y mujeres, especialmente en lo que se refiere a su capacidad intelectual; Sarmiento apuntó los argumentos más progresistas; y Vicente do Seixo vinculó el progreso a la mejora de las condiciones de las mujeres.

Desde el padre Feijóo hasta nuestros tiempos han surgido muchos defensores de la igualdad, pero en la sociedad se ha impuesto una realidad cruda y poco equitativa. Los movimientos feministas y los colectivos de mujeres alzaron la voz siempre que tuvieron oportunidad; ganaron algunas batallas, pero no la guerra. La lucha continúa, pero ahora llegan refuerzos: Jorge, Xosé Francisco, Ramón, Pablo, Julio y Celso, los fundadores de la asociación ’Homes pola Igualdade’.

’No es una guerra’

No se han cambiado de bando, porque ésta no es una guerra de hombres contra mujeres. Es una lucha contra los estereotipos y la tradición machista; varones y féminas tienen que ir de la mano para conseguir que se imponga la igualdad. ’Cuestionamos a figura do home dominante e intentamos achegarnos á realidade dos nosos tempos. A igualdade non foi posible ata agora fundamentalmente pola actitude dos homes, pero tamén hai mulleres que poñen dificultades para que se produza o cambio’, explica Celso Taboada. Los promotores de este colectivo no están reñidos con su masculinidad, ni pretender ser la última avanzadilla de los hombres femi nistas, ni quieren condenar a la extinción al macho ibérico. ’Se entendemos por macho ibérico a un home ó que lle gusta o fútbol e as mulleres, eu tamén son un macho ibérico’. Celso y sus cinco compañeros de viaje sólo pretenden provocar la reflexión e intentar cambiar la mentalidad de quienes quieran escucharles.

El colectivo ’Homes pola Igualdade’ intentará trasladar su filosofía en distintas localidades, que ya se han interesado por su programa de conferencias y talleres de corresponsabilidad. Estarán en Vilagarcía, Santiago, Lalín, Padrón, Toques, Sanxenxo y Carballedo. Adaptarán su discurso a la realidad local y propondrán retos aparentemente alcanzables, como el reparto equitativo de las tareas del hogar. El Instituto Nacional de Estadística (INE) mantiene que las mujeres dedican cuatro o cinco horas diarias a las labores domésticas, mientras que los hombres sólo destinan una.

Aunque sería un pequeño avance, no basta con conseguir una mayor implicación masculina en los deberes del hogar. La corresponsabilidad que defienden estos militantes de la igualdad implica también la defensa de la ’filosofía del cuidado’. ’Igual que ten que haber homes que se plantexen en serio o de quedar na casa cando as mulleres traballan, tamén ten que normalizarse o feito de sexan eles os que se encarguen de coidar os fillos, os maiores ou os enfermos do seu entorno’, explica Celso Taboada. ’Homes pola Igualdade’ es un proyecto abierto a la sociedad que, además de los seis fundadores, ya ha incorporado cuatro nuevos miembros en sus primeros días de vida.

Manifestación

Mientras se organizan y buscan fuentes de financiación, ya han marcado una fecha en el calendario: el 21 de octubre. La cita es a las doce del mediodía en Santiago. El motivo: la convocatoria de una manifestación para reivindicar la erradicación de la violencia de género. Los hombres quieren situarse en primera fila y sostener la pancarta para dar ejemplo a futuros maltratadores.

’Os homes fomos educados para ser protagonistas e agora que temos a oportunidade de entrar nun terreo novo tempos que aproveitar esa potencialidade para berrar contra a violencia. Non queremos roubarlle o protagonismo ós milleiros de mulleres que levan moitos anos loitando contra os maltratos en Galicia, só pretendemos colaborar no que poidamos’. En su lucha por la igualdad, los promotores de esta plataforma intentarán demostrar que los hombres también lloran, cuestionarán la teoría de la ’virilidad ganada a base de golpes en la espalda’ y cargarán contra cualquier brote masculino violento. ’Os homes somos tóxicos’, explica Celso Taboada, ’somos perigosos para nós mesmos’.

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