Los sindicatos CC.OO., UGT y CSIF convocaron para mañana concentraciones ante las cuatro subdelegaciones del Gobierno en Galicia, una en cada provincia, para reivindicar la aplicación de la jubilación parcial anticipada a todos los empleados públicos que, cumpliendo los requisitos, quieran acogerse.
Según avanzaron hoy en rueda de prensa representantes de los tres sindicatos, las concentraciones de delegados se celebrarán a partir de las 11.30 horas ante las subdelegaciones del Gobierno en A Coruña, Ourense, Pontevedra y Lugo. Para el martes 18 está prevista una nueva concentración-manifestación en Madrid.
El responsable de función pública de CC.OO., Carlos Pardo, explicó que la jubilación parcial anticipada es un derecho generalizado para los trabajadores que deben contar con 30 años de cotización a la Seguridad Social; seis años de antigüedad en la firma en la que trabajen actualmente y esta empresa se comprometa a efectuar un contrato de relevo.
De este modo, esta jubilación parcial, para personas con 61 años de edad mínima, permitirá reducir entre un 25 y 70% el tiempo de trabajo y cobrar parte del salario y parte de la pensión, mientras que fomenta el empleo con la contratación de nuevo personal. Las retribuciones casi no tendrían una modificación, precisó Carlos Pardo.
En este sentido, el responsable de la Federación de Ensino de CC.OO., Jesús Fuentes, puntualizó que demandan que se haga compatible el empleo público con la pensión pública, pero sólo en los casos de jubilación parcial.
Así, los sindicatos reivindican la puesta en práctica de este derecho para todos los empleados públicos, como recoge el Estatuto Básico del Empleado Público. En toda España, según los datos de las centrales sindicales, hay unos 2,5 millones de empleados públicos, de los cuales 1,5 millones pertenecen al régimen general y el resto a las clases pasivas --fuerzas y cuerpos de seguridad, docentes no universitarios y demás funcionarios de los cuerpos generales del Estado, entre otros--.
EMPLEADOS PUBLICOS.
En concreto, en Galicia hay unos 150.000 empleados públicos, de los cuales, sin incluir los miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad, 135.000 trabajadores se distribuyen entre el régimen general --86.000 personas-y clases pasivas --48.000--.
Al respecto, indicaron que la media de edad en las administraciones públicas ronda los 50 años y precisaron que un 30% de los trabajadores del área pública en Galicia en un plazo de entre tres y cinco años se podrán acoger a la jubilación parcial, al encontrarse entre los 55 y 60 años.
Con todo, José Fuentes comentó que las clases pasivas tienen una modalidad de jubilación anticipada, por lo que manifestó que la parcial sería complementaria porque les puede solucionar el problema económico, al no perder tanto dinero, compatibilizando el empleo público con la pensión. Además, incidió en que se trata también de no jubilarse de golpe. Es más llevadero ir dejándolo poco a poco, afirmó.
Es un derecho pero no se puede ejercer, destacó Carlos Pardo e insistió en la idea de la jubilación flexible que promueven países europeos. Es una fórmula para evitar pasar de una situación de ocho horas a no hacer nada. Ese choque se puede paliar con la jubilación parcial, sentenció.
El responsable de función pública de CC.OO., Carlos Pardo, explicó que la jubilación parcial anticipada es un derecho generalizado para los trabajadores que deben contar con 30 años de cotización a la Seguridad Social; seis años de antigüedad en la firma en la que trabajen actualmente y esta empresa se comprometa a efectuar un contrato de relevo.
De este modo, esta jubilación parcial, para personas con 61 años de edad mínima, permitirá reducir entre un 25 y 70% el tiempo de trabajo y cobrar parte del salario y parte de la pensión, mientras que fomenta el empleo con la contratación de nuevo personal. Las retribuciones casi no tendrían una modificación, precisó Carlos Pardo.
En este sentido, el responsable de la Federación de Ensino de CC.OO., Jesús Fuentes, puntualizó que demandan que se haga compatible el empleo público con la pensión pública, pero sólo en los casos de jubilación parcial.
Así, los sindicatos reivindican la puesta en práctica de este derecho para todos los empleados públicos, como recoge el Estatuto Básico del Empleado Público. En toda España, según los datos de las centrales sindicales, hay unos 2,5 millones de empleados públicos, de los cuales 1,5 millones pertenecen al régimen general y el resto a las clases pasivas --fuerzas y cuerpos de seguridad, docentes no universitarios y demás funcionarios de los cuerpos generales del Estado, entre otros--.
EMPLEADOS PUBLICOS.
En concreto, en Galicia hay unos 150.000 empleados públicos, de los cuales, sin incluir los miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad, 135.000 trabajadores se distribuyen entre el régimen general --86.000 personas-y clases pasivas --48.000--.
Al respecto, indicaron que la media de edad en las administraciones públicas ronda los 50 años y precisaron que un 30% de los trabajadores del área pública en Galicia en un plazo de entre tres y cinco años se podrán acoger a la jubilación parcial, al encontrarse entre los 55 y 60 años.
Con todo, José Fuentes comentó que las clases pasivas tienen una modalidad de jubilación anticipada, por lo que manifestó que la parcial sería complementaria porque les puede solucionar el problema económico, al no perder tanto dinero, compatibilizando el empleo público con la pensión. Además, incidió en que se trata también de no jubilarse de golpe. Es más llevadero ir dejándolo poco a poco, afirmó.
Es un derecho pero no se puede ejercer, destacó Carlos Pardo e insistió en la idea de la jubilación flexible que promueven países europeos. Es una fórmula para evitar pasar de una situación de ocho horas a no hacer nada. Ese choque se puede paliar con la jubilación parcial, sentenció.
