El Club Carmelitas Vedruna, uno de los clásicos estas últimas temporadas en el “Plan de Patrocinio de Alta Competición de Galicia”, del que Abanca es uno de los principales promotores a través de su “Programa Deporte Base”, acaba de dar un paso más. La entidad colegial contará este curso con todos sus equipos en la Primera División Gallega. Lo ha logrado después de firmar una fase de ascenso inmaculada, con siete victorias y sin derrotas, lo que le ha permitido regresar por la puerta grande a las máximas ligas autonómicas femeninas en las edades de formación: júnior, cadete, infantil, preinfantil y alevín.
“La tarea no era fácil, con el descenso la pasada temporada del cadete del infantil. Ahora no solo han regresado ellas a Primera, también las júnior, con las que llevábamos años sin estar arriba, el preinfantil, que había desaparecido, y el alevín”, destaca Juan Rodríguez, coordinador de Carmelitas.
"Les ha tocado trabajar mucho este verano, con la pretemporada desde el 16 de agosto porque algunas ya jugaron partidos el 4 de septiembre. Ahora hay que seguir, para conseguir con ellas la proyección que tienen.
A todo esto hay que sumar al primer equipo, que ya ha disputado dos partidos (dos victorias) en la Primera Nacional en una temporada cuyo objetivo vuelve a ser el salto de categoría. “Queremos ascender, pero no damos con la tecla. Hemos confeccionado un buen equipo, tenemos un entrenador con experiencia y por detrás, además, un equipo júnior muy potente que nos permitirá cubrir posibles bajas y que ya en este momento está apretando con opciones incluso de mejorar alguna posición del primer equipo. Creo que Ourense necesita un equipo en Liga Femenina 2, pero no es sencillo, porque en esta categoría es dificilísimo fichar”, añade.
Por mejorar
Juan Rodríguez y el resto del grupo de técnicos del Club Carmelitas Vedruna (Diego Peleteiro, Rocío Rivero, Ángel Navarro, Ramonet…) tienen trabajo por delante. “La parte negativa está en la práctica desaparición de la sección masculina, a pesar de los intentos del club, no solo por mantenerla, sino mejorarla. La otra asignatura pendiente es consolidar las categorías más jóvenes (baby baasket y premini). Queremos ampliar al máximo la base de la pirámide. Se está trabajando para abrir escuelas fuera de Carmelitas, mediante convenios con otros colegios y clubes".
