Medio millar de personas y más de un centenar empresas y colectivos sociales de Verín tienen pendientes desde hace años el pago de impuestos por bienes inmuebles, de naturaleza rústica y actividades económicas, así como tasas por la instalación de toldos, escaparates, letreros y vados.
El Servicio de Recaudación de la Mancomunidad de Municipios de Verín, en el que el Concello tiene integrado el cobro de impuestos municipales, acaba de hacer pública la lista para cobrarles la deuda por la vía ejecutiva, embargando sus cuentas bancarias y bienes.
Los afectados disponen de 15 días para regularizar su situación en las propias instalaciones recaudatorias, situadas en la calle Espido, y en caso de no hacerlo verán embargadas sus cuentas bancarias, según el jefe de servicio, Paulino Fernández Salgado.
La mayoría de los deudores tienen el domicilio en Verín, pero también los hay con residencia en el resto de municipios de la comarca e incluso en Madrid, Navarra, A Coruña, Sevilla, Barcelona, Valencia y Pontevedra.
El Servicio de Recaudación optó por ejecutar los embargos después de intentar localizar sin éxito en dos ocasiones a los deudores en sus respectivos domicilios. Es más, el organismo supramunicipal contrató hace seis meses a la empresa privada, Unipost, para que localizara a cada uno de los morosos y le notificara la deuda.
Dentro de la lista de morosos hecha pública hay personas que ya fallecieron, pero no es un impedimento para ejecutar el cobro dado que, según el presidente de la Mancomunidad de Municipios, José Luis Suárez Conde, los familiares deben abonar la deuda al entender que también heredaron todas las fincas, dinero e inmuebles que tenía el fallecido.
MAS DE UN MILLAR
El Servicio de Recaudación de la Mancomunidad de Municipios recauda también los impuestos de Oímbra, Laza, Cualedro, Castrelo do Val, Vilardevós y Monterrei, donde hay un total de 1.445 vecinos deudores, a los que desde hace dos meses se le están embargando sus cuentas para cobrar, en este caso, impuestos por contribución rústica, vehículos y recogida de basura. La deuda se viene arrastrando desde el año 2001, pese a que, según el jefe del servicio, se le había notificado en varios ocasiones a los afectados. Tras la amenaza del embargo de la cuentas, 400 afectados regularizaron la situación, que incluye intereses de demora.
Los afectados disponen de 15 días para regularizar su situación en las propias instalaciones recaudatorias, situadas en la calle Espido, y en caso de no hacerlo verán embargadas sus cuentas bancarias, según el jefe de servicio, Paulino Fernández Salgado.
La mayoría de los deudores tienen el domicilio en Verín, pero también los hay con residencia en el resto de municipios de la comarca e incluso en Madrid, Navarra, A Coruña, Sevilla, Barcelona, Valencia y Pontevedra.
El Servicio de Recaudación optó por ejecutar los embargos después de intentar localizar sin éxito en dos ocasiones a los deudores en sus respectivos domicilios. Es más, el organismo supramunicipal contrató hace seis meses a la empresa privada, Unipost, para que localizara a cada uno de los morosos y le notificara la deuda.
Dentro de la lista de morosos hecha pública hay personas que ya fallecieron, pero no es un impedimento para ejecutar el cobro dado que, según el presidente de la Mancomunidad de Municipios, José Luis Suárez Conde, los familiares deben abonar la deuda al entender que también heredaron todas las fincas, dinero e inmuebles que tenía el fallecido.
MAS DE UN MILLAR
El Servicio de Recaudación de la Mancomunidad de Municipios recauda también los impuestos de Oímbra, Laza, Cualedro, Castrelo do Val, Vilardevós y Monterrei, donde hay un total de 1.445 vecinos deudores, a los que desde hace dos meses se le están embargando sus cuentas para cobrar, en este caso, impuestos por contribución rústica, vehículos y recogida de basura. La deuda se viene arrastrando desde el año 2001, pese a que, según el jefe del servicio, se le había notificado en varios ocasiones a los afectados. Tras la amenaza del embargo de la cuentas, 400 afectados regularizaron la situación, que incluye intereses de demora.
