Verín ya tiene Plan Xeral de Ordenación Urbana (PXOU) aunque para ello han sido necesarios seis años, durante los que hubo que resolver 711 alegaciones de particulares y realizar varios cambios para la alineación de viviendas en las márgenes del río Támega, dados los sucesivos informes desfavorables de la Confederación Hidrográfica del Duero. El último problema han sido las 25 correcciones que tuvo que realizar el equipo redactor por indicación de la Xunta.
El documento urbanístico comenzó a tramitarse en el año 2006 después de que la Justicia anulara otro que comenzó a fraguarse en el año 1998 por deficiencias en el estudio económico. Los constructores tenían que ceñirse a la hora de proyectar viviendas a las normas subsidiarias aprobadas en el año 1986, que desde ayer, con la firma de aprobación definitiva del PXOU, ya son historia, según el alcalde, Juan Manuel Jiménez Morán, que se mostró satisfecho con el nuevo proyecto urbanístico ,'que fai que Verín sexa unha cidade de interior do Eixo Atlántico con un modelo territorial compacto', dijo durante la firma de la aprobación definitiva del Plan de urbanismo llevada a cabo en el salón de sesiones verinense, acto al que asistió el conselleiro de Medio Ambiente e Infraestructuras, Agustín Hernández. 'O documento era necesario para construir obras como o centro de investigación termal, os balnearios, o centro de día ou a escola infantil, para os que ya temos fondos consignados, pero que non podíamos invertir', apuntó Jiménez Morán.
El PXOU también facilitará el traslado de la subestación eléctrica desde el centro de la villa a polígono industrial de Pazos, una obra que venían siendo demandada por los vecinos, dado que las instalaciones están al lado de dos colegios de enseñanza.
El PXOU también facilitará el traslado de la subestación eléctrica desde el centro de la villa a polígono industrial de Pazos, una obra que venían siendo demandada por los vecinos, dado que las instalaciones están al lado de dos colegios de enseñanza.
