El padre de los tres niños abandonados por su madre en una pizzería de Aosta, en el norte de Italia, cumple condena en Alemania por haber matado en 2006 a una cuarta hija cuando apenas tenía siete semanas, informó la policía de Aosta.
Una joven alemana, Caterina Remhof, de 26 años, abandonó a sus dos hijos de 4 y 2 años y a su bebé de ocho meses en una pizzería, tras decir que salía un momento fuera del local para fumarse un cigarrillo.
La noche del domingo Caterina Remhof, acompañada por su pareja Sascha Smidt, de 24 años, que no era el padre de los niños, dijo a sus hijos que estuvieran quietos mientras salían a fumar y no volvieron, según testimoniaron los dueños del local, quienes dieron la voz de alarma a la Policía.
Caterina dejó en el local el bolso con todos sus documentos.
Pocas horas después de hacerse público hoy el suceso, los medios italianos refirieron que el padre natural de los tres niños abandonados se encuentra cumpliendo una condena de dos años y ocho meses de cárcel en Alemania por lesiones y daños causados a una cuarta hija, que murió por el maltrato en 2006 cuando apenas tenía siete semanas.
El tribunal de Siegen, que condenó al padre de los niños, no consideró sin embargo la retirada de la custodia de los otros hijos ni al padre ni a su mujer.
A raíz del abandono en la pizzería y por el procedimiento de urgencia un tribunal de Lennenstadt ha revocado a la madre la potestad sobre sus tres hijos por comportamiento irresponsable.
Mientras tanto los carabinieri, la policía y la guardia de finanzas buscan a la pareja en la región de Aosta, un trabajador de las líneas ferroviarias ha dicho que ha visto al hombre con un billete de tren para Innsbruck.
Además de a los niños, ambos dejaron también el coche sin gasolina y maloliente lleno de pañuelos usados y de paquetes de cigarrillos vacíos, a pocos metros de local donde cenaron, dijeron los dueños de la pizzería.
Los niños se encuentran en estos momentos bajo la tutela de los servicios sociales italianos en una comunidad de Aosta, mientras se estudia su repatriación a Alemania.
La noche del domingo Caterina Remhof, acompañada por su pareja Sascha Smidt, de 24 años, que no era el padre de los niños, dijo a sus hijos que estuvieran quietos mientras salían a fumar y no volvieron, según testimoniaron los dueños del local, quienes dieron la voz de alarma a la Policía.
Caterina dejó en el local el bolso con todos sus documentos.
Pocas horas después de hacerse público hoy el suceso, los medios italianos refirieron que el padre natural de los tres niños abandonados se encuentra cumpliendo una condena de dos años y ocho meses de cárcel en Alemania por lesiones y daños causados a una cuarta hija, que murió por el maltrato en 2006 cuando apenas tenía siete semanas.
El tribunal de Siegen, que condenó al padre de los niños, no consideró sin embargo la retirada de la custodia de los otros hijos ni al padre ni a su mujer.
A raíz del abandono en la pizzería y por el procedimiento de urgencia un tribunal de Lennenstadt ha revocado a la madre la potestad sobre sus tres hijos por comportamiento irresponsable.
Mientras tanto los carabinieri, la policía y la guardia de finanzas buscan a la pareja en la región de Aosta, un trabajador de las líneas ferroviarias ha dicho que ha visto al hombre con un billete de tren para Innsbruck.
Además de a los niños, ambos dejaron también el coche sin gasolina y maloliente lleno de pañuelos usados y de paquetes de cigarrillos vacíos, a pocos metros de local donde cenaron, dijeron los dueños de la pizzería.
Los niños se encuentran en estos momentos bajo la tutela de los servicios sociales italianos en una comunidad de Aosta, mientras se estudia su repatriación a Alemania.
